El horripilante crimen del recluso Nery Orlando López Sanabria, alias Magdaleno Meza Fúnez (37) en la prisión de máxima seguridad, “El Pozo”, en Ilama, Santa Bárbara, solo evidencia que “continuamos con cárceles gobernadas por los propios privados de libertad”, opinó el domingo, Migdonia Ayestas, especialista en temas de seguridad.
“Es lamentable porque es el uso de poder de unos contra otros, ya sea los paisas, los mareros u otras organizaciones que ahí se recluyen, que están ejerciendo ese autogobierno, ya sea en cárceles de máxima o mínima seguridad o las normales, en las cuales se maneja de todo, desde influencias, drogas, armas, ya sea armas cortopunzantes, como machetes y cuchillos, pero, también, ya vimos, armas de fuego. En otras cárceles que se han requisado ya había dinero”, lamentó.
Cuestionó que “cómo puede demostrar el Estado que no hay colusión si hasta en un bus llevaban dinero para entrarlo a esas cárceles de máxima seguridad, que seguramente era para quitarle la vida a este señor Fúnez”.
A su juicio los recientes hechos “solo evidencia la corrupción que se maneja en las cárceles de máxima seguridad, cómo es que son de máxima seguridad”, aunque después decreten estado de emergencia, como en todo.
“¿Qué pasa con los privados de libertad y qué pasa con quienes los cuidan? ¿Hay alguna relación simbiótica? Cómo es que en estas cárceles siendo un espacio seguro, el Estado a cargo de la seguridad de él siguen ocurriendo muertes, o estas muertes son muchas veces selectivas para callar a personas que tenían cuadernos que habían escrito sobre el narcotráfico, donde están involucrados políticos?”, planteó la entrevistada.
Fustigó que “las cárceles de máxima seguridad son un éxito del gobierno, pero ahí matan, ahí contratan gente para que cuiden, ahí hay policías de los centros penitenciarios y es evidencia que hay colusión y que los procesos de selección de personal han fracasado porque solo les piden la recomendación de un político y ahí está el problema porque los procesos de selección pasan por las cartas de recomendación que está dando el Partido Nacional en este momento”.
Cuestionó que la directora del Instituto Nacional Penitenciario (INP) nunca da la cara en acontecimientos lamentables como los hechos del viernes y sábado anterior, donde dos presos, uno vinculado a la “narcolibretas”, han sido ultimados a balazos en los recintos penitenciarios.
Recomendó que a los custodios penitenciarios les hagan incluso investigaciones sobre su patrimonio, que les apliquen una certificación y pruebas de confianza porque hay casos en los cuales, les depositan el dinero a sus cuentas por trabajos ilícitos dentro de las prisiones.
ARMAS DE FUEGO
“¿Deben explicar cómo entraron esas armas, usadas en ambos crímenes, quién las metió y establecer acciones y dar explicaciones. Se debe definir quiénes deben estar dentro de esas cárceles de máxima seguridad, que son dormitorios”, señaló.
En el caso de Magdaleno Meza Fúnez, ya había tenido varios intentos de homicidio, su muerte era crónica de una muerte anunciado, su abogado pidió protección y traslado y no se lo dieron”, expresó Ayestas, tras reconocer que obviamente, el privado de libertad estaba en una cárcel por supuestos delitos, pero eso no significa exponerlo a que perdiera la vida.
Detalló que el gobierno debe dar las explicaciones del caso sobre cómo fue este crimen, que acabó con el autor de las “narcolibretas” que terminaron en el juicio de New York.