La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos de Honduras (Oacnudh) reaccionó el domingo, tras la muerte de dos reos en cárceles de máxima seguridad, tanto en Ilama, como en Morocelí e informó “en ambos casos se había solicitado su traslado a otros lugares de detención y @CONAPREV había alertado a las autoridades sobre los riesgos a la vida y a la integridad personal que representaba su permanencia en los centros penitenciarios en los que se encontraban”.
Precisan que “en el caso del fallecido del #CentroPenitenciario de Morocelí, existe una Resolución Judicial de fecha 25 septiembre en la que estipulaba que el INP ordenara el inmediato traslado de un grupo de privados de libertad que se encontraban en este centro incluyendo al fallecido”.
“Dicha resolución hacía referencia entre otras violaciones al riesgo a la integridad personal que implicaba su permanencia en este centro. Sin embargo, al momento de los hechos el privado de libertad no había sido trasladado”.
“Exhortamos a las autoridades correspondientes a tomar todas las medidas necesarias para prevenir estos hechos, así como a atender las causas estructurales que los generan e investigar exhaustivamente y sancionar a los responsables”.
La Oficina del Alto Comisionado de los Derechos Humanos reaccionó sobre las muertes violentas de Nery Orlando López Sanabria, alias Magdaleno Meza Fúnez y Marco Tulio Amador, cuyos crímenes se perpetraron en Ilama y La Tolva, respecticamente.