El gobierno debe crear con urgencia las condiciones que mejoren el clima de paz para atraer nuevas inversiones y se logren las metas de crecimiento económico establecidas, planteó ayer el presidente del Colegio Hondureño de Economistas (CHE), Luis Guifarro.
Honduras enfrenta mayores dificultades en el contexto de la actividad económica y en las expectativas de crecimiento, fundamentalmente por la inestabilidad política que se registra en algunos sectores, según el análisis.
Hasta agosto del presente año, la serie original del Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) o producción nacional registró un alza acumulada de 2.7 por ciento, casi un punto por debajo del 3.6 por ciento que se observó en mismo lapso de 2018.
Luis Guifarro explicó que, “es muy fácil entender ese comportamiento en la economía hondureña, sino se genera un clima apropiado para los negocios, difícilmente vendrá nueva inversión”.
“No depende de los grados de libertad o maniobra que tenga el gobierno, sino de una situación interna donde no se han formado los consensos y no existen condiciones para mantener un clima de paz”, agregó.
“En esas condiciones no hay formas de que podamos cimentar las bases para una expectativa de mayor crecimiento de la economía hondureña”, insistió Luis Guifarro.
Según el Programa Monetario 2019/2020, el Producto Interno Bruto (PIB) crecerá este año entre 3.0 y 3.4 por ciento, por su parte la inflación no superará el 5 por ciento.
Las actividades económicas que registraron comportamiento positivo en los primeros ocho meses del año fueron las Intermediación Financiera, Seguros y Fondos de Pensiones; Correo y Telecomunicaciones; Industria Manufacturera y Comercio; en menor proporción aportaron la Construcción Privada y Electricidad y Agua.
Lo anterior, fue contrarrestado parcialmente por la evolución negativa de la actividad de Agricultura, Ganadería, Silvicultura y Pesca.