Cuando departía y jugaba juegos de azar fue ultimado el dueño de una pulpería, por supuestos enemigos personales, resultando muerto en el mismo tiroteo un menor de 13 años de edad que había llegado a pasar las vacaciones de Navidad en un sector de Patuca, Olancho.
Una de las víctimas del atentado criminal es José Rosalío Villatoro Cabrera (50), oriundo de Campamento, pero residente desde hace años donde ocurrió el doble crimen.
En el mismo hecho murió por una bala desperdigada Denis Misael Baca Peralta (13), estudiante de tercer año de ciclo de educación básica en el Instituto “José de la Paz Herrera” y que residía en la colonia Villanueva en la capital.
Los hechos violentos se remontan al miércoles pasado en horas de la noche, cuando un grupo de personas se aglomeraba en un reconocido negocio de la colonia La Esperanza, sector de Patuca.
El grupo de gente observaba a varios pobladores que jugaban el famoso “chivo” o juego de dados a cambio de dinero. De repente a la pulpería llegaron al menos dos hombres, quienes desenfundaron sus armas y comenzaron a disparar contra Villatoro Cabrera, por supuestas enemistades personales.
Tras varios disparos los pistoleros ultimaron al dueño de la pulpería y luego huyeron con rumbo hasta el momento desconocido para la Policía Nacional. En el mismo tiroteo los pistoleros hirieron en el cuello al adolescente Baca Peralta.
Por la gravedad de la herida y ante la falta de asistencia médica, minutos después de la balacera, el menor murió desangrado convirtiéndose en la segunda víctima del ataque.
La madrugada de este jueves ambos cuerpos fueron trasladados a la morgue capitalina, donde fueron entregados a sus parientes, después de la respectiva autopsia.
