Comienzo con una interrogante, ¿Cómo se formó este excéntrico criminal? Rafael Galán, en el sitio https://www.esquire.com/ lo deja muy claro: “una infancia de terribles abusos, una adolescencia y una edad adulta de mentiras, locura y de fuerte medicación, una sanidad pública que abandona a un enfermo, una sociedad que se mofa del fracaso, desde los niños que le dan una paliza en un callejón en plena luz del día hasta el gran presentador de late night que se ríe de él delante de todo el país”, han sido el caldo de cultivo que ha llevado a este desquiciado a comportarse como tal.
Afirma Galán, que “si bien Heath Ledger mostraba una versión oscura y volcada a la provocación del caos, la de Phoenix explora la invisibilidad de los derrotados por el capitalismo encarnado en Thomas Wayne”. En segundo lugar, destacar las influencias de Martin Scorsese en el filme de Todd Phillips, en alusión a “El Rey de la Comedia” (1982) y en “Taxi Driver” (1976). Como bien lo señala la crítica, “ahí está Robert de Niro (Franklin Murray) como la versión más frívola de los medios televisivos. Y su contraparte, Arthur Fleck (Joaquín Phoenix) quien se muestra como una especie del Travis Bickle, que encarnó De Niro en “Taxi Driver”, un ser volcado a la demencia”.
Leemos en el sitio https://cuatrobastardos.com/, que De Niro en “Taxi Driver”, hizo un trabajo brillante retratando a un veterano de guerra alienado y excluido por la sociedad que, por culpa de su insomnio, se convierte en un taxista nocturno”. Enseguida apreciamos “cómo Travis se presenta como un marginado y solitario joven que se va guiando nada más que por las voces que escucha en su cabeza. Se obsesiona con una mujer (Cybill Shepherd) que trabaja en la campaña electoral de un aspirante a gobernador y de a poco va convirtiéndose, (consecuencia de su psiquis y de las secuelas en la guerra de Vietnam), en un trastornado alterador del sistema que al final realiza actos, irónicamente, definidos como heroicos por la sociedad”.
“El mensaje social es claro y rotundo: una virtuosa crítica al retraimiento que sufren muchos veteranos de guerra ovacionados que terminan siendo olvidados”. Y en “El Rey de la comedia”, vemos a De Niro en plan similar como Rupert Pupkin, “un individuo patético… aspirante a cómico de stand-up obsesionado con triunfar en el mundo del espectáculo cómico, cuyas dotes como comediante son cuestionadas”. El filme es una “metáfora sobre un mundo en el que la desgracia propia puede ser considerada como una broma al espectador. Y en cómo la miseria ajena es causa de festejo en la sociedad con un hombre capaz de vender su alma al público con tal de ser aceptado”. En tercer lugar, Todd Phillips nos dejó con muchas preguntas y teorías acerca de los eventos del filme. Por ejemplo, ¿Cuánto de la película tiene lugar en la cabeza de Arthur y cuánto sucedió realmente? O bien esta otra: ¿Mató Arthur a su vecina, Sophie Dumond (interpretada por Zazie Beetz)? El propio director en una entrevista con IndieWire, sentencia: “No la mata, definitivamente”.
El sitio https://www.lapatilla.com/, lo cita así: “De hecho, Phillips ha revelado que una de las secuencias eliminadas del filme aclaraba este punto. Esta escena se desarrollaría durante la entrevista al Joker en el show de Franklin Murray y mostraría a una Sophie sana y salva siguiendo el programa desde el televisor de su casa. La escena fue cortada, según el director, para mantener la coherencia con el resto del filme, en el que todas las escenas se narran desde el punto de vista de Arthur Fleck. La relación romántica y ficticia entre Sophie y Arthur sería un claro ejemplo de esto, ya que se presenta desde la perspectiva del protagonista, haciendo creer al espectador el delirio del Joker”.
Y en este orden de cosas, se suma la escena final en la cual vemos a Arthur, sin maquillaje, vestido de blanco, dentro de una habitación del mismo color, riéndose para sí mismo, siendo entrevistado por una psiquiatra… tiene las manos esposadas y está fumando. “Enseguida, se aprecia una larga secuencia mirando el pasillo del manicomio cuando Arthur sale de la oficina de la psiquiatra, dejando huellas sangrientas mientras avanza, lo que implica que mató a su terapeuta. Mientras “That’s Life” de Frank Sinatra continúa sonando, mientras el Joker es perseguido de un lado a otro por los enfermeros del asilo”.
Finalmente, agregar que con el paso de los años, seis actores se han metido en la piel del Joker, sea en cine o televisión. César Romero hizo la primera encarnación del némesis de Batman en 1966, en la cinta que fue protagonizada por el mismo reparto de la serie del “Hombre Murciélago” y que se estrenó el 12 de enero del mismo año. “El actor de origen cubano enamoró a toda una generación debido a su actuación divertida y caricaturizada”. (https://www.yucatan.com.mx/).
Jack Nicholson, en “Batman” (1989), de Tim Burton consiguió retratar la enfermedad y odio social del Guasón, dejándolo entre los mejores intérpretes. Le seguiría un espectacular Heath Ledger, en la película de Christopher Nolan, “El caballero de la noche”, que le hizo ganar un merecido Oscar de reparto, que no pudo recoger por su inesperada muerte. Le siguió Jared Leto, en “Escuadrón suicida” que para los críticos y muchos fans del icónico personaje “fue quien peor lo recreó por haber destruido su imagen al mostrarlo como un gángster salido del Bronx, con el cuerpo lleno de tatuajes, cadenas de oro, ropa brillante y dientes dorados”.
Ahora llega Joaquin Phoenix, el nuevo Joker dándonos una magistral interpretación, para mí, la mejor. Sin olvidar que Cameron Monaghan lo interpreta en la serie para televisión “Gotham”. O que Mark Hamill se convertiría en la voz oficial del Joker tras su paso por “Batman: The Animated Series” (1992).