El futbolista Wilmer Crisanto habló de los insultos racistas que recibió en el duelo frente a Platense en Puerto Cortés y se mostró tranquilo, destacó su buena relación con personas blancas y espera que ese tipo de incidentes no se repitan.
“Crecí con gente blanca, ellos me aman, es feo que pase este tipo de situaciones porque todos somos iguales, tengo muchos amigos en Platense y espero que esto no vuelva a suceder a ningún futbolista”.
Agregó que Dios murió por nosotros y dejó claro que debemos amarnos unos a otros, espero que puedan hacer algo para que este tipo de personas no ingresen a los estadios a burlarse de los demás, no tengo enemigos y trato de jugar al fútbol que es lo que más disfruto.
Crisanto dice hoy le tocó a él, mañana puede ser otro, aseguró que la gente de su raza está intimidada, pero el jugador confía que algún día eso cambie por el bien de la sociedad en general.
Un grupo de aficionados llamó “mono” a Crisanto en el duelo de la primera fecha del torneo Clausura.
