Las alianzas: ¿una espada de Damocles?
Por Boris Zelaya Rubí
Dante Alighieri ubica a los traidores en el último círculo del infierno ya que considera a la traición como el peor pecado de todos. La razón es que, a diferencia de otro tipo de crímenes, para traicionar hay que ganarse la confianza y el afecto de la víctima. Para Nicolás Maquiavelo la traición era una parte fundamental de la política, y quien no estuviera dispuesto a asumirlo nada tenia que hacer en los lugares de poder. Otros han decidido que su provecho personal es mucho más importante que el destino de su patria.
Por el momento no hay consenso para cambiar la fecha de las elecciones primarias o internas de los partidos políticos inscritos. De haber sucedido, los aspirantes a cargos de elección popular que no están integrando el equipo de gobierno, tendrían que recurrir a los “ahorros” que acumularon durante sus correrías en gobiernos pasados, o se verían obligados a pedir contribuciones a los empresarios, para servirles a los que deseen “amarrar” sus transacciones comerciales con el Estado y los “novatos ñangaritas”, tendrían que mendigarles algunas monedas a sus admirados “tiranos de izquierda”. Ha quedado claro, las elecciones primarias serán por ley, en el mes de marzo del año 2021. A los “primerizos” que pensaron hacer campaña utilizando los medios a su alcance sustraídos de los bienes y fondos del Estado bajo su jurisdicción ¡se les ahumó el ayote! Tendrán que ganarse a la ciudadanía realizando sus labores con mucho tino y honradez.
Algunos de los noveles aspirantes, deben tener presente el refrán popular: “Aunque la mona se vista de seda, mona se queda”. No importa que traten de aparentar ser los “salvadores” de Honduras y se hagan pasar por grandes señores o grandes damas, siempre se les notará lo inescrupuloso y la “academia” de donde proceden, tendrán que aprender a mentir como si fueran actores de cine, aparentando decir la verdad y con palabras sencillas, engañar al pueblo.
Unos estarán a favor del actual gobernante, prometiendo darles continuidad a sus obras y actuarán en consecuencia junto al compromiso moral de confianza que les otorgó el voto ciudadano y los que “babean” por volver, señalarán los mil y un defectos del gobierno, aun siendo del mismo partido político.
La estrategia de acortar la fecha para las elecciones internas, podría obedecer a las “maquiavélicas” intenciones de desviar la atención de la ciudadanía de los problemas que a diario magnifican los ñangaritas y quitarles, el cada vez más fallido llamado a la insurrección. ¡A medirse en las urnas se ha dicho!
En cuanto a los tránsfugas o traidores a los partidos que los lanzaron a la palestra pública y los sustrajeron del anonimato (puede ser que se trate de enmendar un error) ¿serán sencillamente oportunistas? ¿las 30 monedas de plata? El pueblo los evaluará con mucho recelo y recordará: ¡el que traiciona una vez vuelve a traicionar! Ojalá, que cuando se dirijan a los nuevos correligionarios, no se vayan a equivocar tirándole vivas a los compañeros de sus antiguas guaridas políticas, tal y como lo hizo el excandidato liberal cuando gritaba: ¡viva el partido nacio…liberal!
Por el momento todos los padres de la patria deben estar a la “vigiona” de las acciones vengativas de la moderna “inquisidora”, que se viste de negro portando una guadaña con los labios pintados de rojo carmesí, como el color de la sangre.
De rodillas solo para orar a Dios.
