Por Israel Romero Puerto
Juris Doctor (Jurista Internacional), PhD
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Si la ley todavía vale en Honduras, con la salida del diputado Osman Chávez del PAC convierte a esa institución política en nula y sin efecto, pues la Ley Electoral y la Constitución estipulan que un partido político no puede desaparecer si tiene un diputado en el Congreso Nacional.
La ley significa que si un partido político hace menos del dos por ciento de votos generales y no saca un diputado, su existencia tiene que extinguirse. Cuando el “Tierno” salió del PAC y se adhirió al Partido Liberal, esa figura legal de no tener siquiera “un diputado” se cumple. Por lo tanto, la “Cachira” se queda sin partido. Bueno, no tenía porque se lo había robado al ingeniero Nasralla.
A LA CORRUPCIÓN LLAMAN PATRIOTISMO Y A LA IMPUNIDAD LLAMAN SOBERANÍA
Hay que comprender que cambiar el nombre de un organismo oficial no cambia el sistema. El Ministerio Público cambió el nombre de la UFECIC, que ahora se llama UFERCO. Siguen los mismos al frente de la oficina, con los mismos lineamientos, obligaciones y responsabilidades. O sea, hacer nada, porque el status quo continúa intocable.
Lo mismo sucede con la salida de la MACCIH. Ebal Díaz asegura que esa dependencia de la OEA puso en evidencia la corrupción e impunidad en Honduras, y es esa la razón porque organismos internacionales dan a Honduras el calificativo de corrupto. Ese calificativo data de unos 20 años atrás, cuando el gobierno americano puso el “timbre” de narco-Estado a Honduras, y esa es la denominación con que Honduras se conoce internacionalmente.
El “Índice de Percepción de Corrupción” es una ponderación simple de indicadores de percepción de corrupción. Ese índice coloca a Honduras como el más corrupto de Centroamérica, con 2.5 grado de percepción, y un lugar 131 de 180 países, lo que significa un elevado nivel de corrupción, el más alto de la región. La salida de la MACCIH enfatiza que el gobierno hondureño no está interesado en combatir la corrupción e impunidad. Por el contrario, los casos propulsados por la MACCIH quedarán impunes porque ahora no hay quien los empuje.
La medida con que el gobierno de Honduras puede demostrar su genuino interés en combatir el narcotráfico – especialmente de funcionarios públicos, incluyendo diputados, policías y militares- es la creación de una CICIH como rama de la ONU, y dar pasos positivos para resolver los cuatro casos más sonados de 2019: La Caja Chica de la Dama, La Red de Diputados, El Pacto de Impunidad, y el Caso Pandora.
Otros casos sonados en Honduras son: la Caja Chica del Hermano, la Licitación Fraudulenta del Seguro Social, el Arca Abierta, el Fraude sobre el Gualcarque, Patuca III (Colusión y Corrupción), Narco-Política, y Caso Becas, donde la Secretaría de Salud con falsos becarios despilfarraron más de 10 millones, según reportó el Ministerio Público, sin mencionar que quien ordenó asesinar a Berta Cáceres sigue oculto.
CONCLUSIÓN. Cuando corren del país a organismos internacionales que ayudan a combatir la corrupción e impunidad porque lesiona la soberanía nacional, se están fomentando esos flagelos y protegiéndolos. Es decir se llama a la corrupción patriotismo, y a la impunidad soberanía.
