CON EL BRAZO ESTIRADO

OM
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6 de febrero de 2020
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12:44 am
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CON EL BRAZO ESTIRADO

CAPITALINOS Y EL AEROPUERTOLO DOMÉSTICO Y LA SOLIDARIDAD

FUE un discurso sobre el Estado de la Unión en medio de una atmósfera tensa y divisiva que enfrenta a demócratas y republicanos en los Estados Unidos. Horas antes que el Senado, de mayoría oficialista, resuelva absolver a POTUS de los cargos del “impeachment” iniciado en la Cámara Baja, controlada por la oposición. El veredicto al juicio político se decide, no por los cargos o las pruebas presentadas en su contra, o por los argumentos de la defensa refutándolas, sino obedeciendo las líneas de partido. Entre los congresistas los demócratas tenían la mayoría para montar el “impeachment” pero, en el Senado, los republicanos son quienes controlan y cuentan con los votos necesarios para eximir a Trump. No hubo declaración de testigos. Únicamente el intercambio –una mezcla de criterios jurídicos y políticos– entre acusadores y defensores.

Ya en la sesión conjunta del Congreso los ojos se centraron en los tanteos de uno y de otro lado. De cómo sería el recibimiento al presidente de parte de quien le inició un juicio político y de su comportamiento al encontrarse con ella. No fueron saludos de buenos amigos. Trump se volteó, haciéndose el disimulado, para no estrechar la mano de Pelosi quien, en acto de cortesía, se la extendía sin anticipar que sería rechazada. Innecesarias las palabras para describir la acrimonia cuando los gestos son suficientemente elocuentes. La señora quien rara vez obsequió aplausos a lo largo de la intervención, no se iba a quedar con el desaire después que le dejaron con el brazo estirado. Al finalizar su disertación, ubicada a espaldas de Trump –consciente que las cámaras de televisión enfocaban hacia ellos– rompió en pedazos los papeles del texto del discurso que POTUS le había entregado. Ya entrando al fondo del discurso. Respecto a su política migratoria de “seguridad fronteriza” celebró “los acuerdos de cooperación que su gobierno alcanzó con México, Guatemala, Honduras y El Salvador”. “Como resultado de esfuerzos sin precedentes, los cruces ilegales (en la frontera sur) han bajado un 75% desde mayo, reduciéndose por octavo mes consecutivo”. A los inmigrantes: “Si vienen ilegalmente, serán expulsados rápidamente”. “Comenzaremos la construcción de un gran, gran muro a lo largo de nuestra frontera sur.

Comenzará antes de lo previsto y, cuando esté terminado, será un arma efectiva contra las drogas y el crimen”. En lo pertinente a Venezuela. “Con nosotros en la galería está el presidente legítimo de Venezuela, Juan Guaidó”. “Todos los estadounidenses están unidos con el pueblo venezolano en su lucha por la libertad”. “Aquí entre nosotros, un hombre valiente que lleva con él las esperanzas, los sueños y las aspiraciones de los venezolanos”.
“Nicolás Maduro es un gobernante ilegítimo que brutaliza a su pueblo; y el dominio de la tiranía de Maduro va a ser aplastado y roto”. “Lleve el mensaje a su país –dijo dirigiéndose a Guaidó– que Estados Unidos los apoya”.

Fue uno de los raros instantes cuando tanto republicanos y demócratas aplaudieron, poniéndose de pie para saludar al venezolano que se encontraba en el palco entre los invitados especiales. También dedicó frases a otros gobiernos del continente: “Estamos apoyando las esperanzas de cubanos, nicaragüenses y venezolanos para restaurar la democracia”. Como era de esperarse, ya sobre el otro tema pendiente: “El Senado de Estados Unidos absolvió a Trump de los cargos de abuso de poder y obstrucción al Congreso después de un juicio histórico de destitución que dejó en evidencia la división del país, la firme autoridad del presidente en la interna republicana y la capacidad oratoria del demócrata Adam Schiff, quien ejerció el papel de fiscal jefe”.

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