Cómo vaciar tu mente para un mejor desempeño y resolución de problemas
Por: Pamela Ayuso
Estoy convencida de que una de las más grandes amenazas para la mente adulta es la cantidad de información que almacenamos en ella. Todo el día, nuestro cerebro procesa miles de elementos pendientes e incompletos:
* Olvidaste regresarle la llamada a un cliente.
* La propuesta todavía no está terminada.
* Casi termina el período para declarar impuestos y no has preparado la documentación.
* La impresora ha tenido problemas y tendrá que repararse.
* Tienes que empezar el proceso de reclutamiento para un nuevo puesto de mercadeo.
Es algo imparable. Los recordatorios no se detienen hasta que completemos las tareas. La meta del cerebro es ayudarnos a sobrevivir, y esta es una forma en que lo hace. Y tu cerebro tiene razón: la información es útil e importante.
Sin embargo, el costo es que no tenemos espacio para pensar en nada más. No podemos pensar de forma estratégica sobre nuestro negocio ni mirar hacia nuevas oportunidades. A veces, no podemos ver el panorama general para resolver problemas mayores. Simplemente sobrevivimos.
Pero no tiene porqué ser así: hay otra forma de hacerlo. La única razón por la que tu cerebro está tan lleno de pendientes es porque no ha sido vaciado. Tu mente solo está tratando de ayudarte ya que es el mecanismo principal que tienes para recordar las cosas que debes hacer.
Cómo vaciar tu mente y mantenerla vacía
Prueba un método nuevo: tan pronto como aparezca un asunto pendiente en tu mente, escríbelo. La clave no es solo escribirlo, sino también asegurarte de que te encargarás de ello más tarde. En otras palabras, el recordatorio deberá colocarse en una lista de pendientes que completarás después. De otra forma, tu cerebro no será engañado y seguirá recordándote hasta que termines tus deberes.
Puedes intentar escribir todas las tares que vengan a tu mente hoy, y seguir haciéndolo mientras progresa tu semana. Te tomará algo de tiempo el descargar todos los elementos pendientes. También puede ser algo frustrante ya que, pasar todas estas cosas a tu lista de pendientes, también significa reconocer todas las cosas que no has hecho y debes hacer. No te preocupes, lograrás pasar al otro lado y tendrás más paz mental.
Sin embargo, no desaparecerán los pendientes por completo. Incluso si vaciaste tu mente, esta seguirá recordándote sobre todas las tareas nuevas que debes hacer. No se detendrá, pero los recordatorios se reducirán de forma significativa.
La meta básica es seguir escribiendo los elementos pendientes en tu lista de tareas cada vez que aparezcan. Sin embargo, la meta más avanzada es descubrir patrones y usar estos recordatorios (no tan sutiles) de tu cerebro para llevar tu desempeño al siguiente nivel.
Mientras consigues más práctica vaciando tu mente, notarás algunos temas recurrentes. Por ejemplo, cada mes debes recordar el conciliar tus cuentas bancarias. Empezarás a tener pendientes alrededor del principio del mes. Esto te recuerda la necesidad de apartar algo de tiempo en tu apretada agenda. Tu mente entonces seguirá diciéndote que no has conciliado tus cuentas hasta que lo hayas hecho.
Para eliminar este problema recurrente, puedes programar un recordatorio mensual el día primero de cada mes. Hasta puedes programar estos días en tu calendario para todo el año, de modo que el espacio quedará reservado y te asegurarás de que tu conciliación bancaria mensual se complete a tiempo. Al planear para hacer tu conciliación bancaria, ni siquiera le darás la oportunidad a tu cerebro para que tenga que recordarte.
También debes prestar atención a otras señales que pueden indicar un problema. Tal vez empieces a darte cuenta de que siempre eres el recordatorio para uno de tus empleados. Puedes tratar de escribir los elementos pendientes en tu lista tanto como puedas, pero esto no eliminará la raíz de tu problema. Es posible que este empleado no haya desarrollado un buen método para encargarse de sus tareas pendientes y necesite recibir entrenamiento sobre el desarrollo y manejo de una lista de pendientes.
Cuando por fin tu mente se encuentre más libre, empezará a ayudarte a resolver problemas de forma más eficaz. Serás capaz de identificar patrones de eventos emergentes que pueden indicar un problema futuro, tal como el comportamiento de un empleado o las tendencias de compra de un cliente. Entonces podrás enfocar tu energía en el manejo de estas situaciones, tomando pasos preventivos para arreglar los problemas y hasta pensando estratégicamente sobre nuevas oportunidades de negocios.
Sigue haciendo crecer tu negocio
Mientras sigues creciendo, también aparecerán tareas nuevas. Tan solo sigue el mismo proceso de descargar tus asuntos pendientes y resolver problemas. Asegúrate de estar al tanto de todo y mantén tu mente vacía. Tu activo más valioso para el crecimiento de tu negocio es tu mente, y está allí para ayudarte a tener éxito.
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