Jorge Faraj: Está demostrado que la alternabilidad en el poder fortalece las democracias
SAN PEDRO SULA. El empresario Jorge Faraj finaliza este próximo viernes sus cuatro años de gestión presidencial de la Cámara de Comercio e Industrias de Cortés (CCIC) y habla con LA TRIBUNA sobre los logros de su gestión y los retos que enfrenta el país en el área social, económica y política.
Faraj, como presidente de la CCIC, se ha caracterizado por impulsar a los emprendedores a través del proyecto “Bazar del Sábado”, iniciativa que le ha permitido a miles de hondureños crecer con sus propios negocios.
También, durante su período la CCIC cuestionó las políticas públicas del país e insistió que se deben fortalecer las instituciones para que Honduras sea competitivo para la inversión.
El reconocido empresario ha sido un fuerte crítico de la corrupción, porque la considera “el enemigo número uno” del Estado de Derecho y la raíz de todos los problemas de Honduras, entre ellos la pobreza.
Faraj también responde por qué no aspiró a la presidencia del Cohep.
¿Cómo han sido estos cuatro años frente a la presidencia de la CCIC?
Han sido cuatro años muy valiosos, con muchos desafíos, pero, también, de muchas satisfacciones. Representar al sector empresarial de la zona norte ha sido un gran compromiso y un gran honor del cual me siento muy agradecido con Dios. Me voy complacido de haber cumplido mi misión, que fue la de servir.
¿Qué logros destaca de su gestión en beneficio de los agremiados de la CCIC?
Primero, que hemos actuado conforme a la misión de nuestra organización, hemos hecho siempre lo correcto pensando en el bien común. Abrimos las puertas de la CCIC a todos nuestros afiliados, garantizando siempre el goce de sus beneficios y promoviendo alianzas comerciales. Uno de mis objetivos al asumir la presidencia de la CCIC fue apoyar a la Mipymes y lo hemos logrado. Creamos el proyecto Bazar del Sábado, que ahora es el rostro social que le hacía falta a esta Cámara, es un proyecto con un gran impacto positivo. Con esta iniciativa, además, promovemos el comercio de productos hondureños y le abrimos oportunidades a los emprendedores para que ingresen a grandes mercados. El Bazar del Sábado ha superado nuestras expectativas, el proyecto ya está en 12 ciudades y esperamos que siga creciendo.
¿A qué retos se enfrentan actualmente las Mipymes en el país?
Falta de locales con alquileres económicos para establecer su venta u operación, falta de educación formal para administrar sus negocios, dificultad para conseguir clientes al detalle o al por mayor, la formalización y el financiamiento; con todo esto les hemos estado apoyando a través del Bazar del Sábado.
Esta iniciativa reciente de la CCIC de ‘Seamos Solidarios con la Mipymes’ ¿cómo surge?
Muchos emprendedores afiliados a la CCIC nos han dicho que se están enfrentando a problemas de liquidez, porque no reciben los pagos a tiempo de parte de las empresas a quienes brindan servicios. Estamos promoviendo una campaña para que las empresas que contratan sus servicios puedan ser una mano amiga de las Mipymes pagándoles en un plazo máximo de 30 días, ya hemos estado teniendo una respuesta muy positiva y firmaremos un pacto moral con las empresas para motivar a que así sea.
La CCIC se ha identificado también por cuestionarlas políticas públicas, como el manejo del presupuesto, la administración de la ENEE y la devaluación…¿qué han propuesto en estos temas?
Nosotros hemos sido congruentes al señalar objetivamente lo bueno y lo malo de la administración pública, lamentablemente, es más lo malo y los indicadores económicos y sociales, ya sea locales e internacionales, así lo demuestran. Considerando que el país urge que vaya en la ruta correcta, hemos hecho propuestas, pero no han sido tomadas en cuenta.
Ofrecimos acompañamiento para el diseño de un manejo transparente del presupuesto general, el cual debe tener una priorización en función de las necesidades del pueblo hondureño más necesitado, también ofrecimos apoyo para administrar la Empresa Nacional de Energía Eléctrica (ENEE), que lo que requiere es entre otras cosas, la reducción de las pérdidas técnicas y no técnicas, la liberación del mercado, la revisión de todos los contratos de generación y el contrato con Energía Honduras, el refinanciamiento de la deuda y lo que contempla la Ley General de la Industria Eléctrica, que entró en vigencia en mayo de 2014 y que a la fecha, no se ha podido implementar. Hemos señalado, además, que el gobierno debe ser más pequeño, eficiente y regulador.
Respecto a la devaluación es un tema que siempre hemos cuestionado, porque por beneficiar a unos pocos, afectan a millones de hondureños, reduciendo su capacidad de compra, lo cual no es justo ni correcto. Por eso hemos propuesto que se regrese al sistema de banda cambiaria donde la moneda se mantuvo estable por muchos años.
También, propusimos medidas de alivio económico para la población, como la ampliación de la base exenta del Impuesto sobre Renta y reducir el impuesto a los combustibles en el diésel y la gasolina regular, tampoco las consideraron cuando son medidas que urgen para alivianar la carga de los hondureños.
¿Eso le ha costado el distanciamiento con el gobierno?
Se debe tener sobre todo humildad y querer actuar en beneficio del bien común para aceptar lo que está mal y trabajar en corregirlo. Sí, sí ha habido distanciamiento por las diversas posiciones que la CCIC ha asumido en base a la situación real que enfrentamos todos los hondureños; sin embargo, nosotros hemos continuado trabajando como organización en pro del desarrollo y el progreso social económico. Hemos apoyado a los emprendedores y los empresarios hondureños seguimos invirtiendo para generar oportunidades, pero las condiciones del país deben mejorar para que también venga la inversión extranjera y podamos satisfacer la gran demanda de empleo que hay.
¿Qué panorama económico vislumbra?
Nos esperan dos años muy difíciles, el país no va por la ruta correcta. Estamos en una desaceleración económica desde el 2017, lo que sostiene al país son las remesas de nuestros compatriotas en el extranjero y no la productividad; esto realmente nos debe entristecer porque es el reflejo de que no tenemos las condiciones adecuadas de competitividad para poder depender de la producción interna y no del dinero de los hondureños que han salido del país arriesgando sus vidas por falta de oportunidades económicas. Se deben tomar las decisiones que nos lleven a un rumbo de desarrollo económico y social. El fortalecimiento del Estado de Derecho y un ambiente político estable es fundamental para atraer inversiones, hemos insistido además que necesitamos políticas tributarias competitivas y la simplificación administrativa.
¿Cuál es el problema más grande que ve en Honduras?
El deterioro del Estado de Derecho, del 2014 a la fecha, hemos retrocedido 25 posiciones en el ranquin del ‘World Justice Project’ y este es el factor fundamental que hace la diferencia entre un país exitoso y un fracasado. Con un Estado de Derecho débil no hay condiciones para el desarrollo económico y social.
¿Qué deteriora el Estado de Derecho?
El enemigo número uno del Estado de Derecho es la corrupción y es por eso que la prioridad de todos los hondureños debe ser contribuir para combatirla. El irrespeto a las leyes es parte también de la corrupción y acá nuestros políticos la irrespetan constantemente cuando deberíande dar el ejemplo. Algo que le ha hecho daño a nuestro país es la reelección presidencial, la cual es ilegal desde que entró en vigencia nuestra Constitución en los inicios de los años 80. Está demostrado que la alternabilidad en el poder fortalece las democracias.
La CCIC se opuso a la salida de la Maccih, ¿no cree que nuestras instituciones están listas para luchar contra la corrupción?
La corrupción es un enorme monstruo en nuestro país que aunque haya voluntad y capacidad de algunas personas en nuestras instituciones, solas no podrán hacerle frente. Por eso es necesario el acompañamiento internacional. Hay que limpiar al país de este flagelo que sabemos, no es exclusivo de políticos o funcionarios públicos, también hay corrupción en parte de la empresa privada y en otros sectores de la sociedad. Como lo ha señalado el Fosdeh y el CNA, se pierden L65 mil millones anuales por corrupción, dinero con el cual le podríamos asegurar el acceso a la educación, los servicios de salud y seguridad al pueblo hondureño y no podemos seguir así.
¿ Por qué no buscó la presidencia del Cohep?
Ya había una aspiración abierta de continuar del presidente actual y pensé que lo conveniente era acompañarlo siempre y cuando, pudiéramos trabajar con las estrategias correctas.
¿Lo ven algunos de sus colegas como el empresario rebelde o antigobierno?
Lamentablemente en este país tener principios, valores y decir la verdad tiene un costo personal. Yo no tengo negocios con el gobierno y aunque los tuviera, mis principios siempre me indican hacer lo correcto, algunos no entienden o no creen que hay personas que sí estamos pensando y actuando por el bienestar de nuestro país y no por el beneficio particular, porque yo soy un convencido que cuando en un país están bien sus ciudadanos, todo prospera.
¿Cómo analiza la situación social y política actual del país?
Muy complicada. Nuestro país urge de cambios estructurales y también de nuevos liderazgos. Honduras ya no da para más equivocaciones, hay que encaminar al país por la ruta correcta y es por eso es que necesitamos que personas capaces y honradas participen en la política.
¿Cree que se están haciendo las reformas electorales que el país necesita?
No, no vemos que estén trabajando en las reformas electorales que garanticen la transparencia del próximo proceso electoral del 2021 y nos preocupa mucho. La inestabilidad política es otro de los factores que más afecta el clima de negocios, lo que ha ocurrido en procesos anteriores no se debe repetir nunca más.
Sobre el aeropuerto de San Pedro Sula, ¿teme la CCIC que le pase lo mismo que al Toncontín?
En esto quiero reiterar que los sampedranos no vamos a permitir que dejen al aeropuerto Ramón Villeda Morales para vuelos locales o regionales. Me preguntaban que de dónde hemos sacado eso y precisamente en agosto de 2019, el representante del Aeropuerto de Múnich, Martín Kamlah, dijo que Palmerola concentraría los flujos de vuelos internacionales de toda Honduras, lo repitió nuevamente en una reunión con empresarios en Tegucigalpa. Nos preocupa que hasta ahora no veamos que haya condiciones para una licitación pública, internacional y transparente para la administración del aeropuerto, en la cual creemos deben participar muchas empresas a fin de tener ofertas competitivas para tener una terminal aérea de primer nivel en San Pedro Sula.
¿Cómo mira el futuro del mercado laboral en el mundo?
Estamos en la cuarta revolución industrial, las revoluciones anteriores como la máquina de vapor, la electricidad y las computadoras trajeron retos importantes al mundo y hubo cambios significativos en los tipos de empleo que demandan las empresas. A parte de los cambios a nivel de empresas se tuvo enormes diferencias en el mundo en cuanto a los países que se adaptaron rápidamente y los países que no, generando enormes diferencias de riqueza que aún en la actualidad existen. La cuarta revolución industrial será lo mismo.
¿Se está preparando Honduras para la cuarta revolución industrial?
A nivel académico he visto a las universidades muy activas generando conciencia y empezando a adaptar sus planes de estudios para los tipos de trabajo que se demandarán a raíz de la cuarta revolución industrial. El problema que tenemos es que el porcentaje de nuestra población que llega a las universidades es muy poca y tenemos que diseñar estrategias como país que nos ayuden a preparar a la gran mayoría que no pueden acudir a una universidad. Es por eso que la CCIC está apoyando un esfuerzo del gobierno de México para que 10 mil jóvenes puedan hacer una pasantía por ocho meses en las empresas para que puedan ser capacitados en diversas áreas, que desarrollen sus habilidades y una experiencia laboral que les facilite encontrar un empleo permanente.
Frases destacadas
“El fortalecimiento del Estado de Derecho y un ambiente político estable es fundamental para atraer inversiones”
“Los empresarios hondureños hemos continuado invirtiendo para generar oportunidades, pero necesitamos mejores condiciones para poder satisfacer la gran demanda de empleo que hay”
“Con la nueva junta directiva estoy seguro que la CCIC continuará siempre velando por condiciones idóneas para la inversión y por el bien común. Soy un convencido que cuando en un país están bien sus ciudadanos, todo prospera”
“Los sampedranos no vamos a permitir que dejen al aeropuerto Ramón Villeda Morales solo para vuelos locales o regionales”
“La alternabilidad en el poder es saludable para las democracias”
“El enemigo número uno del Estado de Derecho es la corrupción y es por eso que la prioridad de todos los hondureños debe ser contribuir para combatirla”
DATOS
Gestión Presidencial
Jorge Faraj durante cuatro años ha sido el presidente de la CCIC. Este próximo viernes 28 entrega su gestión y los socios de esta organización elegirán en Asamblea General a un nuevo presidente.
Afiliación
Durante la gestión de Jorge Faraj en la CCIC la membresía creció un 45%, actualmente son 2,924 socios de la pequeña, mediana y gran empresa de la zona norte que forman parte de esta organización.
Bazar del Sábado
Más de tres mil emprendedores han sido beneficiados con el proyecto Bazar del Sábado. En San Pedro Sula y Tegucigalpa todos los sábados exponen más de 500 microempresarios.
