…Si se hace, malo, y si no se hace, ¡también!
Las alianzas: ¿una espada de Damocles?
Por Boris Zelaya Rubí
“…La prensa, la radio y la televisión han jugado un papel esencial, como un verdadero “cuarto poder”, en su función de investigar, denunciar y poner en negro sobre blanco el detallado relato de las disfunciones, imperfecciones y corruptelas que afectan a nuestro sistema político. Pero, asumiendo lo anterior, es también necesario comentar, que no siempre es oro todo lo que reluce en el mundo de los medios de comunicación, especialmente tras estos difíciles tiempos de crisis económica”.
¿Será tanta la ambición por el poder, que deshumaniza a los políticos? Situaciones tan desesperadas, que pueden causar la muerte a miles de ciudadanos, no deben ser utilizadas para interés político, pues el “coronavirus” no preguntará de qué partido es cada quien, a la parca eso no le interesa. No podemos ni siquiera imaginar que los medios tarifados, se presten a motivar a la gente negativamente contra el gobierno, por una falla que más bien nos pone en alerta para salvar la vida de todos. Solo falta que digan que el Presidente es el causante del virus, ¡bárbaros!
La prevención o los protocolos sanitarios a seguir por la aparición del nuevo flagelo de la humanidad, el virus denominado Covid-19, conocido mundialmente como “coronavirus”, ha puesto en zozobra a todas las poblaciones del mundo y el nuestro, siendo de los más pobres, también. Apareció una hondureña proveniente de China Taiwán, con síntomas de la enfermedad, lo que inmediatamente encendió las alarmas, las que por ser primera vez (esperamos que no existan más), sacaron a la luz las fallas al protocolo de seguridad, las cuales fueron aprovechadas por la prensa y los antagónicos al régimen actual, como pretexto de ataques con fines de causar daño. Si se hace, malo y si no se hace, ¡también!
Se pusieron al descubierto algunas irregularidades en la protección de los demás, que gracias a Dios son enmendables. Los camarógrafos queriendo meter las cámaras casi en la boca de la supuesta portadora del virus, puso en peligro la vida de los que viven de las noticias, que entre más explosivas mejor, pensando en el aumento de audiencia o teleaudiencia por no haber previsto los encargados, una distancia o cerco de seguridad con alguna cinta que dijera “prohibido el paso, límite de acceso a particulares”. Los que estuvieron tan cerca sin la protección adecuada deberían haber estado en observación, mientras se daba el resultado de los laboratorios.
Al ser interpelada la ministra de Salud Pública, que cómo fue posible que la prensa haya inundado con sus cámaras y grabadoras los lugares del arribo e internado de aislamiento, manifestó que investigaría quién fue la persona que con esa acción sembró el pánico en la población, y sancionaría si resultara ser algún empleado de la institución que ella rectora. Afortunadamente y gracias al gran Arquitecto del Universo, al hacerle las pruebas a la viajera resultaron negativas, en caso contrario nos hubiéramos quedado sin los ágiles camarógrafos y reporteros, y sería un caos mayor que las famosas quemas del bosque o los extorsionadores. La OPS confirma que no existen casos del “coronavirus” en Honduras.
¡Alerta! Gran amenaza se cierne sobre un movimiento político y la posible candidatura de su máxima figura, las nuevas generaciones están en peligro, se acerca el “carcoma virus”. Algunos personajes de la vieja guardia, están usando como estrategia de unidad, insertarse como si fueran eternamente jóvenes, y más parecen “elefantes moribundos que finalizaron su ciclo de vida y caminan a su cementerio”. Déjenle espacios a la juventud, ¡insaciables!
De rodillas solo para orar a Dios.
