Dirigente obrero llama “Mercaderes de la muerte” a los que aumentan precios
El dirigente obrero José Luis Baquedano calificó de “mercaderes de la muerte” a los comerciantes que aumentan el precio de los productos por emergencia del COVID-19 en Honduras.
“Es lamentable la situación que estamos viviendo en el país, como los mercaderes de la muerte se están aprovechando de la necesidad y la miseria del pueblo”, increpó.
Baquedano denunció la especulación por parte de comerciantes con los precios de los productos de la canasta básica.
Lamentó que la Fiscalía de Protección al Consumidor no haga nada y solo ofrezcan soluciones vía electrónica para resolver el problema.
“El problema es en las calles, verificar in situ como se han aumentado todos los productos de la canasta básica, hay productos que han incrementado 100 por ciento”, aseveró.
El dirigente sindical apuntó que es imposible garantizar la seguridad alimentaria al pueblo hondureño con los altos precios y ponen en precario el abastecimiento.
ADECABAH COMPRUEBA ESCALADA
El presidente de la Asociación para la Defensa de la Canasta Básica (Adecabah), Adalid Irías, lamentó que algunos establecimientos han elevado los precios de los productos.
Dijo que esto no se justifica ya que el transporte de distribución de alimentos está autorizado a circular y los mercados municipales están funcionando como central de abasto.
Inicialmente, recordó que «una realidad socioeconómica del país es que entre el 55 y 60% de la población en el área urbana y rural viven al día, es decir que compran sus alimentos diarios porque el poder de compra no es alto como para comprar para una semana o un mes».
«Y esa preocupación se ha visto acrecentada por las restricciones del (estado de excepción) que lógicamente tiene un fin de proteger a la población para no contagiarnos del coronavirus», apuntó.
En ese sentido, analizó que al estar cerrados los mercados como el Zonal Belén, centenares de pulperías que se abastecen de ahí, están quedando sin productos y por lo tanto están incrementando los precios.
«Al bajar esa movilidad en el comercio por las restricciones puestas, obviamente ha ocasionado que algunas pulperías se queden con poco inventario y estén incrementado los precios», señaló.
A lo anterior ejemplificó el caso de la medida de frijoles, la que se está adquiriendo a 80 lempiras cuando antes de la crisis valía entre 55 y 60 lempiras; igualmente, el cartón de huevos el cual valía entre 110 y 120 lempiras y hoy tiene un costo mayor.
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