Serán muchos Honduras tus muertos, pero todos caerán sin ventilador
Serán muchos Honduras tus muertos, pero todos caerán sin ventilador
Por Dr. Alejandro Herrera
Desde hace un par de años no me tomaba el tiempo para realizar una columna periodística, pero creo que es el momento de explicarle a la población detalles sobre lo que está pasando y lo que pasará. La pandemia del coronavirus es un hecho sin precedentes en nuestra historia moderna, previamente en la historia han existido múltiples pandemias producto de pobres sistemas sanitarios y escaso conocimiento científico. El día de hoy existen muchas hipótesis sobre el tratamiento, profilaxis y teorías sobre las causas que provocan casos severos; pero carecemos de datos científicos para tener conclusiones fidedignas.
Por más de una década el sistema de salud pública de nuestro país ha estado colapsado; y esto se debe a la falta de inversión tanto en infraestructura, como en inversión de recurso humano capacitado. Hoy la pandemia está en Honduras y estamos lo menos preparados posible. Dentro de infraestructura, en toda Honduras tan solo contamos con 140 camas –1.5 camas por cada 100,000 habitantes– en las salas de cuidados intensivos, con apenas 10 ventiladores mecánicos funcionales en el sistema público y alrededor de 90 ventiladores mecánicos a nivel privado.
En recurso humano solo contamos con alrededor de 20 médicos especialistas en cuidados intensivos, para 9.58 millones de habitantes. Ellos son los profesionales con mayor conocimiento sobre el tratamiento y abordaje de pacientes en estado de salud crítico. Ellos son los que tienen mayor conocimiento sobre el uso de los ventiladores mecánicos. Ahora, recordemos que todos estos recursos no son exclusivos para el COVID-19; estos recursos también son indispensables para pacientes infartados, con derrames y/o accidentes automovilísticos que requieren de este equipo para sobrevivir.
Ahora hagamos el contraste con Italia, uno de los países más afectados por el COVID-19, que contaban con 6,343 camas antes de la pandemia y ahora con más de 8,370. Esto quiere decir que tienen alrededor de 13 camas por cada 100,000 habitantes, totalmente diferente a las 1.5 camas de nuestro país. En el área más específica para esta enfermedad, el área de neumología, antes contaban con 6,625 camas ahora cuentan con más de 26,619. Y a pesar de estas reformas, y de tener un sistema de salud del primer mundo –estando aún más preparados que nosotros– su sistema de salud colapsó y sigue colapsado, reportando más de 1,000 muertes diarias, sobrepasando las cifras de China.
Honduras no está preparado para lo que viene y como médico hondureño lo único que me queda decirles es la cruda realidad: que no tenemos ninguna oportunidad contra el coronavirus. Y no importa la cantidad de dinero que usted tenga o las conexiones que hayan hecho, porque no encontrará ventiladores mecánicos, camas o un profesional calificado para atenderlo. Usted, yo y todos los hondureños solo podemos hacer dos cosas durante este caos: la primer cosa es encomendarnos a Dios, pues necesitaremos un milagro que corrija años de negligencia política hacia el sistema de salud público; y dos, quedarnos en casa siguiendo todas las medidas de prevención. Recuerdo en mis años de estudiante, cuando un maestro mencionaba que Jesucristo se paseaba por los pasillos del Hospital Escuela, porque ante la falta de recursos muchos sanaban de milagro. Hoy más que nunca esto se vuelve una realidad… Honduras serán muchos tus muertos pero todos caerán sin ventilador…
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