La pandemia COVID-19 alterará orden nacional para siempre

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20 de abril de 2020
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12:31 am
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La pandemia COVID-19 alterará orden nacional para siempre

Por Marcio Enrique Sierra Mejía

Lo que estamos haciendo como Estado y como sociedad es correcto. La protección urgente de todos nuestros ciudadanos es ni más ni menos una sabia y acertada decisión. Y sin duda alguna, hoy por hoy, es incuestionable que debemos prepararnos u organizarnos para enfrentar “una nueva época”.

El distanciamiento social que estamos experimentando y la necesidad de aplicar estrictas medidas sanitarias nos llevan a hacernos la siguiente pregunta elemental: ¿Estamos visualizando la época post COVIS-19? En nuestra Honduras hemos transitado distintas épocas por razones políticas más que por otras razones. Empero, en la actualidad la necesidad del cambio o el transitar a otra época, es en razón pandémica sanitaria. Y así es, veamos las épocas.

La dictadura militar se impuso por un poco más de diez años, dándole un tinte dizque democrático, solo porque se producían elecciones para favorecer como candidato a la Presidencia a un militar, uno tras otro. Con los militares, se produjeron cambios que no estoy seguro si fueron planificados con sagaz antelación o meditada prospectiva. El gran cambio estructural que se produjo consistió en la implantación legal de la Reforma Agraria, la implantación de un enfoque macroeconómico de sustitución de importaciones; con lo cual, para bien o para mal, se quebró el “modus operandi” con respecto a la tenencia de la tierra a fin de probar la colectivización de empresas campesinas. Lo que fracasó estrepitosamente y la bendita sustitución de importación solo benefició a número reducido de grandes empresarios que operaron con la protección del Estado.

Nuestro Estado no logró consolidar dicha estrategia y lo que ocurrió realmente fue el debilitamiento total de la economía y demostrar un fracaso de la intervención del Estado en la economía. Así terminó la dictadura militar entregándonos un país en quiebra y con una ciudadanía realmente empobrecida que enfrentaba la desestabilización económica total. Entonces, volvieron los gobiernos civiles, pero también llegaron sin estar preparados, tanto así que, cuando se produjo el ajuste estructural neoliberal, tampoco estábamos listos para otro nuevo cambio de época.

El neoliberalismo se convirtió en la doctrina económica estelar y de nuevo se produce un cambio de época económica: la del mercado libre, minimizándose la intervención estatal en la economía, privilegiando la ley de libre oferta y demanda para la fi jación de los precios y promoviéndose la privatización de todas aquellas empresas estatales o agencias públicas que intervenían en la economía indiscriminadamente, eliminándose los subsidios y promoviéndose la producción hacia afuera y una economía abierta al mundo o economía global.

Al día de hoy, tenemos un neoliberalismo en crisis y la infl uencia del Estado con mayor preponderancia, para determinar la dinámica del mercado. Y es bajo estas condiciones socioeconómicas que nos cae la pandemia que nunca antes experimentamos y mucho menos prevista, para poder enfrentarla fortalecidos. Viviendo en un aislamiento social obligatorio que nos llegó estando divididos, con un gobierno eficiente pero vilipendiado, a tal punto, que la ciudadanía poco confía en su accionar, y ante lo cual, debe también lidiar con fuerzas politicas oscuras para poder salir avante.

En consecuencia, demostrar con hechos la eficiencia y transparencia para lograr la confianza pública se convierte en la condición sine qua non que puede hacer ganar la solidaridad social, la paz y la estabilidad ciudadana interna. ¿Cómo vamos a enfrentar la coyuntura pandémica mientras dure esta desde el ángulo económico? ¿Qué nos depara el futuro una vez superada la pandemia de COVID-19? Actualmente, tenemos un contexto económico adverso no tanto debido a una crisis financiera sino de personas, de salud y bienestar. El rol del Estado y no del mercado ha asumido el papel central para vencer al virus y los riesgos que afectan a la economía y la cohesión social. Lo inmediato es aplanar la curva de contagios lo cual implica contracción económica, paralización prácticamente total de actividades productivas y detrimento de la demanda agregada/sectorial. ¿Qué salidas tenemos para combinar medidas estrictas de cuarentena y medidas de salud pública con procesos inteligentes que activen la producción reduciendo los costos? Me parece que necesitamos apoyos de la cooperación internacional.

Por ejemplo, de los israelitas en el tema agrícola y otros apoyos en el tema financiero.

¿Cuáles recetas económicas se podrían aplicar?: préstamos estatales, subsidios de desempleo, aplazamiento de impuestos, aplazamiento y subsidios a la seguridad social y aplazamientos al pago de deuda. ¿Qué política fi scal es la más apropiada para la recuperación económica y garantías a las empresas? ¿Qué proyección se estima de gasto en salud y en recuperación económica? ¿En qué otras medidas fi scales pueden el Estado pensar para aplicarlas? ¿Cuáles garantías estatales de préstamos a las empresas se puede aplicar? ¿Podríamos subsidiar a empresas y trabajadores y establecer garantías de préstamos de largo plazo? Está claro, debemos planifi car y cambiar la época neoliberal.

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