La pandemia y los políticos

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13 de mayo de 2020
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12:47 am
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La pandemia y los políticos

Relevo generacional

Miguel Osmundo Mejía Erazo*
*Profesor y periodista [email protected]

Los hondureños estamos en una situación muy delicada, no vemos que las personas contagiadas y las que han perdido la vida a causa del COVID-19 vaya en disminución, al contrario los presagios de los expertos no son tan halagadores, incluso tenemos médicos y enfermeras y mucho personal de salud que han contraído el virus en el ejercicio de su profesión, igual que soldados, policías, bomberos, periodistas, todos aquellos héroes y heroínas que están al frente de batalla contra esta pandemia que ha paralizado el mundo entero. Para que nuestra gente entienda la gravedad del problema los médicos han anunciado a la población que este virus no hace diferencia de personas, razas, clase social, todos sin excepción estamos expuestos, desde el Presidente de la República hasta aquel humilde compatriota en la más remota aldea o caserío de nuestra amada Honduras. Aun conociendo la situación hay personas que no acatan las sugerencias de los profesionales de la salud y se atreven a enfrentar a la misma autoridad uniformada, responsable de hacer que las disposiciones se cumplan para evitar que siga aumentando el número de contagiados y muertos.

Se dice que “la mente desocupada es taller del diablo”, hoy que llevamos muchos días de encierro obligado, las oficinas y los negocios abandonados pasamos las 24 horas del día en casa, al lado de la familia y a solas en nuestros estudios, dormitorios o rinconcitos preferidos que siempre tenemos para darle rienda suelta a nuestros pensamientos, los cristianos para orar o rezar, es oportuno el momento para leer y reflexionar sobre muchas situaciones de la vida, incluyendo el propósito divino de permitir esta pandemia. Mientras nosotros estamos tranquilos en casa, miles de personas entre autoridades de alto nivel, profesionales de salud, seguridad y todos los que tienen que ver con el malévolo COVID-19 están tratando de resolver los problemas que aumentan a diario, otros tienen su mente inclinada pensando en las “elecciones”, nadie cuerdo de la mente está interesado en eso dentro de la pandemia, todo tiene su tiempo, llegará el momento según lo dejen establecido en la nueva Ley Electoral, conforme la legislación actual en marzo 2021 serían las internas según el Artículo 106 y “son para elegir sus autoridades de partido, cuyos procedimientos deben establecerse en los estatutos y reglamentos”.
En otras ocasiones hemos explicado que hay tres tipos de elecciones: las internas para elegir las autoridades de partidos, puede ser en asambleas o convenciones, las elecciones primarias son para la escogencia de los candidatos de elección popular, según el Artículo 113 reformado de la actual ley, ya que antes se realizaban “el tercer domingo del mes de noviembre del año anterior al que se practiquen las elecciones generales”. El Tribunal Supremo Electoral (TSE) hoy Consejo Nacional Electoral (CNE) “deberá convocar a elecciones primarias seis meses antes de su realización”. Algunos partidos hacen sus elecciones internas antes de las primarias, pero lo normal es realizar ambas simultáneamente, la ley establece que los partidos van a elecciones primarias siempre que existan dos o más movimientos internos, en las elecciones primarias e internas del 2012 solo participaron tres partidos: Nacional, Liberal y LIBRE, se gastaron unos 800 millones de lempiras y en las generales del 2013 más de 1,680 millones de lempiras, una de las más caras en los últimos años, pues en el 2017 se pasaron de los 2,000 millones de lempiras.

No sabemos cómo estaremos a finales del año y principios del próximo, en vista de que en el 2021 se van a realizar dos elecciones, proponemos que las internas y primarias sean costeadas por cada partido, lo han hecho en otras oportunidades, no nos engañemos ahora que quedaremos en la quiebra con mayor razón, además solo tres partidos hacen primarias, los otros en asambleas nacionales. Las últimas elecciones primarias del 2017 costaron L. 807 millones, se debería reducir el número de diputados y bajar el sueldo a todo funcionario público que gana más de L.100 mil, algunos sin hacer nada, no es justo mientras los sistemas de salud y educación colapsados desde hace años por culpa de los políticos, los dineros mal invertidos se deben cancelar y hacer los cambios en el presupuesto nacional. Por ahora queremos ver los políticos ayudando a combatir esta pandemia en sus comunidades, como lo están haciendo algunos, no deben tomarse vacaciones pagadas con el dinero del pueblo, piensen y trabajen por Honduras aunque sea una vez en la vida.

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