Resguardados migrantes caribeños y africanos pernoctan en Santa Ana
Policías del municipio de San Lorenzo, Valle, les proporcionaron agua y algunos víveres a los migrantes caribeños y africanos.
CHOLUTECA. El éxodo de los migrantes haitianos y cubanos, en su mayoría, y algunos africanos prosiguió desde la zona sur, donde durmieron a la intemperie a inmediaciones del puesto de control policial de Pavana, en esta jurisdicción, y anoche en Santa Ana, Francisco Morazán.
Los 102 migrantes, entre hombres, mujeres y niños, comenzaron su caminata la mañana del martes desde la ciudad de Choluteca, sin embargo a la altura de la comunidad de El Marillal, un contingente policial les impidió el paso y hubo algunos forcejeos, pero luego les permitió continuar.
Personas de gran corazón al ver la situación de los extranjeros, les ofrecían agua en bolsa y víveres, sobre todo porque debido a la inclemente temperatura por los rayos solares, denotaban deshidratación y eso les obligaba a descansar por momentos bajo las sombras de algunos árboles a la orilla de la carretera y tomando sus bebidas.
La marcha continuó temprano ayer miércoles sin que las autoridades policiales les impidieran el paso y los llamados “indocumentados” recibieron agua y alimentos de los uniformados destacados en el municipio de San Lorenzo, Valle, hasta darles custodia para evitar incidentes en el tramo carretero.
Una coordinación de los organismos de socorro como Cruz Roja, Cuerpo de Bomberos, Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) junto a la Policía Nacional, se realizó a favor de los migrantes por si era necesario prestarles ayuda por problemas de salud.
EN CAMIÓN
Los haitianos, cubanos y africanos, después de varios kilómetros de caminar, fueron apoyados por el motorista de un camión en ruta al departamento de Comayagua, que se ofreció a llevarles y al llegar a la zona limítrofe de Choluteca (municipio de San Isidro) y Francisco Morazán, los esperaban personeros de derechos humanos.
Personal del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Policía Nacional e Instituto Nacional de Migración (INM), esperaba a los extranjeros en la zona de la cuesta de la Moramulca para una revisión médica. Los 102 migrantes fueron revisados cuidadosamente y les tomaron la temperatura para determinar en qué estado de salud se encontraban, sobre todo frente a la actual pandemia de coronavirus.
La Policía Nacional, INM y ACNUR, custodiaban el camión con los extranjeros hasta la excapital Comayagua, lugar hasta donde llegaba el conductor de la unidad, pero las mismas autoridades decidieron que la caravana pasara la noche en el área de la posta del municipio de Santa Ana, Francisco Morazán, mientras decidían para dónde los llevan. (LEN)
