Madrugada de terror matan cuatro personas
Madrugada de terror matan cuatro personas. Madrugada de terror matan cuatro personas. Cuatro miembros de una misma familia, dos hombres e igual cantidad de mujeres, fueron ultimados la madrugada del viernes, a inmediaciones de la colonia Villanueva de Tegucigalpa.
Las víctimas se dedicaban a limpiar vidrios de carros en uno de los semáforos de la colonia Miraflores de Tegucigalpa y a cambio solicitaban una ayuda económica a los conductores.
Los cadáveres fueron encontrados en un predio cerca de la intersección del bulevar Fuerzas Armadas con el anillo periférico, a inmediaciones de la colonia Villanueva.
En la escena del crimen se podía observar que las personas fueron ultimadas con armas blancas y les desfiguraron el rostro con enormes piedras, cuando las tenían atadas de pies y manos.
Los ahora occisos fueron identificados por las autoridades como Carlos Armando López Sánchez (19), Edwin Alexander García Sánchez (21), Kenia Cálix (35) y Ana Cálix (17), sobrina de la penúltima.
INTERCEPTADOS
Carlos López era primo de Edwin García y el marido de Kenia Cálix, por lo que se presume que los tres y la menor regresaban hacia sus casas ubicadas en la colonia Villanueva.
“El jueves por la noche yo le dije: hijo, no salgas a trabajar, porque aquí en la casa por lo menos tenemos frijolitos y arroz, mejor anda aplícate las inyecciones para que andes tranquilo”, relató Ruth Yamileth Sánchez, madre de Edwin, mientras reclamaba el cadáver de su hijo en la morgue capitalina.
Limpiándose las lágrimas de su rostro, la consternada progenitora contó que, en una ocasión, Edwin la golpeó, ya que padecía algo similar como la esquizofrenia y por eso recibía tratamiento en el Hospital Psiquiátrico “Santa Rosita”.
En medio del dolor, la señora agregó que la noche del jueves, su hijo y las otras tres personas salieron de sus casas, supuestamente con rumbo a la colonia Miraflores.
De esta forma, presumen que cuando regresaban caminando hacia sus viviendas fueron raptados por los criminales, quienes los amarraron de pies y manos antes de ultimarlos de forma dantesca.
Edwin García convivía con su abuela materna en el sector cinco de la colonia Villanueva, cerca de la casa de su madre, Ruth Yamileth y era el mayor de cinco hermanos. (EB)
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