Al recorrer la capital en motocicleta, chicas “delivery” le “sacan el jugo” a la pandemia

ZV
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15 de junio de 2020
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05:10 am
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Al recorrer la capital en motocicleta, chicas “delivery” le “sacan el jugo” a la pandemia

Las chicas se desplazan en sus motocicletas hasta barrios y colonias de la capital, para hacer las entregas.

La pérdida de empleos ante la emergencia nacional por la pandemia de COVID-19 y la necesidad de generar ingresos inspiró a un grupo de mujeres a crear una empresa de “delivery” 100 por ciento femenina, conformada por unas 14 mujeres motociclistas.

La empresa del servicio de entregas a domicilio se llama “Flash Girls”, creada por Mesly García, Pamela Carolina Almendárez y Eliana Isabel Avendaño Almendárez.

Según comenta la encargada de mercadeo, Mesly García, la empresa “surge de la necesidad que hay de generar ingresos a muchos hogares, ya que son madres las que están al frente de sus casas para llevar el pan de cada día”.

Según la Encuesta Permanente de Hogares de Propósitos Múltiples 2019 del Instituto Nacional de Estadística (INE), 739,561 hogares hondureños son sostenidos por mujeres cuyo ingreso per cápita es de 3,549 lempiras.

Sin embargo, la cuarentena por COVID-19 dejó a miles de “catrachas” sin trabajo, entre ellas, muchas de las que ahora trabajan para “Flash Girls”, quienes han hecho de sus motocicletas una valiosa herramienta de trabajo.

“Debido a la pandemia, hubo muchos despidos, suspensiones sin pago de salarios, entonces al ver tanta necesidad, decidimos ponernos mujeres sobre ruedas”, explica García.

La empresa contrata a mujeres que posean su propia motocicleta y según comenta García, aún hay oportunidad para integrar a más “chicas”.

“Flash Girls” les está dando la oportunidad a madres solteras y jóvenes emprendedoras a que ellas puedan generar ingresos, de las 14 que tenemos ahorita ingresadas, ocho de ellas son madres que tienen más de dos hijos, y las demás son jóvenes emprendedoras”, expresa la entrevistada.

Amas de casa y emprendedores figuran entre la clientela de la empresa 100 por ciento femenina.

ENTREGAS EN CASA

¿En qué consiste el servicio? García detalla que “estamos realizando todo tipo de mandados: compras a las farmacias, a tiendas de conveniencia, a los supermercados”, de lunes a domingo, de 7:00 de la mañana a 6:00 de la tarde.

En el caso de las compras en supermercados, el cliente debe brindarle a la empresa, un día antes, vía WhatsApp, una lista con los productos deseados, así como con los sustitutos, en caso de no encontrar los solicitados.

Luego, al cliente “se le está entregando por la mañana, al día siguiente, ya con factura en mano, hacemos todo lo posible porque la lista se cubra al 100 por ciento”.

Entre la clientela de las damas sobre ruedas también figuran emprendedores que ofrecen sus productos a domicilio, como comidas y varios artículos, para lo que requieren de los servicios de entrega.

“Estamos también llevando paquetes de los emprendedores que venden productos desde su casa, de comidas, encomiendas, sobres, paquetitos, ¡Le estamos entrando a todo tipo de encomienda!”, afirma García, con entusiasmo.

Las “catrachas” que crearon la empresa Flash Girls, no solo generaron empleos, sino que también contribuyen a que miles de capitalinos se queden en casa y prevengan el COVID-19, al llevarles sus compras a domicilio. (CF)

DATOS
¿Cuánto cuesta contratar a las chicas motorizadas? El cobro oscila entre los 50 y 100 lempiras o más, en el caso de recorrer largas distancias. Uno de sus clientes, José Carlos Rivas, dueño de la microempresa Casa Limpia, expresó que “estoy muy satisfecho con el trabajo realizado por las “Flash Girls”, más que todo por la juventud que tienen, por lo emprendedoras que son y lo eficientes, rápidas y seguras”.

EMPLEADA
LA EXPERIENCIA ES SÚPER BUENA

Una de las empleadas de “Flash Girls” es Allyson Yesenia Ventura Arteaga (21), quien trabajaba como cajera en una empresa de comida rápida, pero cuyo contrato finalizó en diciembre del 2019. Debido a la pandemia ya no pudo obtener un empleo y ahora que por fin logra trabajar, se siente muy contenta.

“La experiencia es súper buena porque le facilita a uno conocer el área de Tegucigalpa, las colonias, nos dan capacitaciones de atención y servicio al cliente, de seguridad, tenemos buen compañerismo, una jefa que nos mira como si fuéramos hijas”, cuenta la joven.

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