Guatemala repatría remanente de la última caravana de hondureños
Bajo custodia policial, fueron entregados los hondureños.
CORINTO, CORTÉS. Poco menos de un centenar de jóvenes compatriotas, que lograron ingresar a territorio guatemalteco de manera ilegal, tras cruzar hace dos días puntos ciegos, plantaciones bananeras y la costa, fueron retornados el miércoles por las autoridades policiales y militares de ese hermano país,
A bordo de patrullas policiales y del ejército de Guatemala, los hondureños ingresaron ayer temprano al punto de control fronterizo de Guatemala, en donde se les hizo todo el protocolo de seguridad e identificación antes de ingresar al complejo de la aduana, donde los esperaban funcionarios policiales y de migración.
Antes de ingresar de nuevo al país los migrantes retornados, fueron asistidos en primeros auxilios y hasta en alimentos básicos por parte de los miembros de la Cruz Roja, de Izabal, que se apostaron en la tranca que separa la carretera CA-14 de ambos países para suministrarles raciones conteniendo desayunos.
Una vez cumplido este requisito, los retornados tuvieron que esperar un par de horas por mientras se hacían las coordinaciones necesarias para obtener un transporte para poder trasladar a los recién llegados al menos a la Gran Terminal de Buses, de San Pedro Sula, desde donde salieron el lunes en la noche.
Al no tenerse respuesta de ninguna autoridad de Tegucigalpa, ni mucho menos de San Pedro Sula, porque en estos momentos escasea el presupuesto para estos imprevistos, se logró entrar en contacto con el alcalde Ricardo Alvarado, que de manera inmediata dispuso del importe necesario para cancelar el transporte.
“Entendimos la situación de estos compatriotas y resultaba muy lamentable que ellos se quedaran fatigados y desperdigados en la aduana y de cualquier modo había que sacarlos de ese lugar, para que lleguen de inmediato a sus hogares nuevamente”, dijo el jefe edilicio tras contratar los buses interurbanos para hacer los viajes.
Muchos de los retornados aseguraron que tanto efectivos de la policía de Izabal, como del ejército guatemalteco, acantonado en el sector fronterizo, lanzó desde ayer una vasta operación terrestre para detener a cuanto hondureño ingresara en la caravana, de manera que no hubo oportunidad de escapar ni mucho menos de continuar el viaje.
