Se reduce $419.7 ingreso de remesas en el Triángulo Norte
La recesión económica por COVID-19 aprieta el grifo de las remesas para los países del Triángulo Norte de Centroamérica, que en conjunto dejaron de recibir alrededor de 419.7 millones de dólares, principalmente de Estados Unidos, entre enero y junio de este año.
Un reporte de los bancos centrales de la región muestra que el primer semestre del año en Honduras se observó una disminución de 108.2 millones de dólares o 4.2 por ciento, pero por debajo de la caída que se esperaba cuando entró la crisis económica por la pandemia. Las remesas familiares sumaron un total de 2,464.6 millones, menor a 2,572.8 que entraron en el mismo período del 2019.
Los flujos de remesas también se vieron reducidos, sin embargo, por debajo del 1 por ciento para Guatemala, el reporte muestra que a la economía guatemalteca dejó de captar 46.7 millones de dólares.
El Salvador aparece como el país más afectado, pese a que el informe solo contabilizó los flujos de enero a mayo, se presentó una disminución del 11 por ciento, con menos de 264 millones de dólares que no ingresaron a la economía del país.
El resumen estadístico indica que, durante el primer semestre del año, los tres países captaron aproximadamente 9,359.9 millones de dólares, menor en comparación al mismo periodo del año pasado cuando la cifra superó los 9,779.6.
En términos de porcentajes la disminución total ronda el 4.29 por ciento y de acuerdo a economistas esta tendencia se podría ampliar, pero todo depende de cómo se comporte la recesión en países como Estados Unidos.
En las Perspectivas Económicas Globales de junio del Banco Mundial, aparece que el PIB estadounidense cayó un 7.9 por ciento en el primer semestre de 2020. Pero el empleo mostró una leve mejoría en mayo pasado donde vive más de un millón de hondureños que mensualmente envían dólares a sus parientes.
La disminución en Honduras es moderada, a comienzos de la pandemia se esperaba hasta un 20 por ciento menos en remesas lo que preocupó a distintos sectores, dado que estos flujos representan alrededor de un 20 por ciento del PIB anual.
Analistas consideran que al agudizarse la crisis económica en Honduras con un 90 por ciento de la economía paralizada, entonces, los catrachos están enviando más dinero en auxilio de sus parientes. (JB).
