“Pido solidaridad con la gente que más sufre”

MA
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14 de julio de 2020
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03:16 am
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“Pido solidaridad con la gente que más sufre”

El obispo emérito de Copán, monseñor Luis Alfonso Santos, dijo que “Honduras ha caído en una vorágine de políticos corruptos y estos siguen en el poder ante la vista y paciencia de un pueblo que no está organizado”.

“Los que se quieren suceder en los distintos cargos del poder establecido, algunos tienen fama de corruptos”.

“Yo no sé cómo pretenden subir a la presidencia del país u otros cargos con la fama de corruptos que han tenido”.

“Del Partido Nacional no quiero hablar porque me van a tildar de partidario, en general pido que haya solidaridad con la gente que más sufre y eso no es privativo de los católicos o los sacerdotes”.

“La corrupción es mala en todo tiempo y hay que desecharla, la corrupción es un pecado ante Dios, porque se toma un dinero que le pertenece a la mayoría del pueblo y sobre todo a la gente más pobre, por eso es que la corrupción es un gran pecado ante nuestro Señor, pero mucho peor en estas circunstancias que estamos viviendo”.

El líder religioso agregó, en entrevista con la radio HRN, que no tiene pruebas para señalar a actuales funcionarios por actos ilícitos, “pero el rumor de la gente es que hay corrupción”.

El obispo emérito criticó que el pueblo no esté organizado para contar con sus propios organismos contralores para investigar a los corruptos de los gobiernos, “mientras eso no exista, en Honduras es por gusto hablar de democracia”.

Santos lamentó que el oxígeno se torne inalcanzable para la mayoría de la población y citó las duras condiciones económicas que se acentúan por la pandemia desde hace cuatro meses. “A los que me llaman de donde sea, les he recomendado que siembren maíz y frijoles, todavía hay que aprovechar la de postrera porque la carestía que se va a venir es enorme”, apostilló.

Aceptó que la pandemia agarró desprevenida a Honduras, al extremo que en los hospitales no tenían ni siquiera mascarillas, guantes y equipo médico.

“Hay que tener fe en Dios porque este pueblo es creyente, hay que caer de rodillas y pedirle a Dios que esta pandemia se vaya, porque aquí no hay poder humano que pueda salvar al pueblo”.

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