Economía y salud, falso dilema

ZV
/
16 de julio de 2020
/
12:20 am
Síguenos
  • La Tribuna Facebook
  • La Tribuna Instagram
  • La Tribuna Twitter
  • La Tribuna Youtube
  • La Tribuna Whatsapp
Economía y salud, falso dilema

Infraestructura resiliente ante desastres

Por: Álvaro Sarmiento

Desde marzo pasado, constantemente he escuchado y leído de parte de todo tipo de personas, especialmente gobernantes de algunos países, la inmensa mayoría de columnistas de opinión, médicos y por supuesto los expertos en todo “todologolos”en las redes sociales, un supuesto dilema entre la salud y la economía.

El razonamiento es bastante básico, fácil de explicar y mucho más de “comprar”, la única manera de vencer a la pandemia, o más bien de “aplanar” la famosa curva, (en la que pocos creen ya) es que todos nos quedemos en casa, esperando días, semanas, meses y seguramente pronto serán años, para evitar la multiplicación de contagios, muertes, colapso del sistema de salud, etc. Aplicar el famoso “pasar el agua”, aunque creo que todos tenemos la experiencia de esperar que pase la tormenta sin éxito, porque tenemos que llegar sí o sí a nuestro destino, y no nos queda más que arriesgarnos, mojarnos y tomar las medidas preventivas para no resfriarnos.

Llamo falso dilema, porque no se hace referencia ni ponen sobre la mesa los otros costos y repercusiones del confinamiento total. Lastimosamente en nuestros países no se está llevando la contabilidad de las personas que no están recibiendo sus tratamientos de hemodiálisis, quimioterapias, trasplantes de órganos, etc. Efectos de fatalidades en el mediano plazo que seguramente serán muy superiores al peor escenario que se ha previsto con el COVID. No me imagino la curva de fatalidades por el dengue en el corto plazo.

Recientemente, en entrevistas realizadas al CEOs de Cementos Progreso en Guatemala, José Raúl González trajo a nuestra memoria, los efectos de la generación de producción y riqueza mundial en la salud mundial, concretamente en indicadores como expectativa de vida, o disminución de mortalidad en recién nacidos a lo largo de la historia, con pandemias, guerras civiles y mundiales de por medio.

CEPAL ya adelantó algunos números para Latinoamérica, cierre de 2 millones de empresas, 38 millones de desempleados, 83 millones en pobreza extrema.

Falso dilema, porque cuando utilizamos el término “economía” nos referimos a la capacidad de cada hondureño para producir y consumir. Sin producir algo, bien o servicio que otras personas quieran consumir libremente, no tendremos ingresos para comer, donde el COVID será otro problema adicional en el listado, pero no el único ni el más importante. La utopía de un gobierno que pueda brindar los bienes necesarios a toda la población para esperar la vacuna debe estar descartada de nuestras mentes.

Tampoco tiene sentido comportarse sin prudencia o creyendo que el COVID es un catarrito. La prudencia, o término medio es descrito por el CEO de la cementera. “Tenemos que aprender a vivir con el virus y mientras no haya una vacuna se tiene que aprender a gestionar los riesgos que este conlleva”. Ante las amenazas con las que hemos convivido por años, como “la neumonía, enfermedades cardíacas y renales, cáncer, accidentes de tránsito y violencia… cada quien toma sus medidas de salud y seguridad y ahora con esa misma mentalidad y filosofía de vida debemos entender que tenemos que prepararnos para operar en el nuevo normal ante el COVID-19.

El argumento histórico es irrefutable, el creador y dinamizador de la salud y en general del bienestar social es la generación de riqueza, llamémosla “economía”. Salud y economía son las dos caras de la misma moneda, el individuo.

Más de Columnistas
Lo Más Visto