Una actividad similar a jornadas anteriores se notó en el reinicio de actividades económicas en Tegucigalpa y Comayagüela.
La reapertura económica en la capital y otros municipios del país inició ayer, con pocas diferencias de movilidad, en relación a días previos, después de un intento fallido que se produjo a comienzos de junio, cuando se habló de aumento de contagios por la COVID-19.
En un recorrido de este rotativo por calles comerciales y “malls” de Tegucigalpa y Comayagüela, constató un movimiento de personas y vehículos similar al que se ha venido observando durante casi cinco meses de cuarentena.
La actividad de las empresas fue tímida, la economía informal se mantuvo operando como lo ha venido haciendo de forma inadvertida durante el confinamiento.
Este comportamiento obedece a que las empresas están coordinando aspectos logísticos para su personal, en vista que el transporte público sigue paralizado, razonó el director ejecutivo de la Cámara de Comercio e Industria de Tegucigalpa (CCIT), Rafael Medina.
También por la incertidumbre que surgió, luego de esperar por varias semanas el anunció que llegó hasta el martes al mediodía cuando en Consejo de Ministros se autorizó avanzar de la fase 0, a la fase 1 de la cuarentena.
Medina resalta que la mayoría de negocios empezaron a operar acatando los protocolos de bioseguridad, al tiempo de confiar que aumente la actividad en los próximos días.
DEL 20 AL 40% SIN UTILIDADES
El gobierno autorizó a las empresas formales de las ciudades confinadas bajo la categoría 3, empezar a operar con un 20 por ciento de la fuerza laboral apegadas a los protocolos de bioseguridad.
Al menos, en la capital se notó en los comercios y personas en general, el acatamiento de las medidas de bioseguridad tales como, uso obligatorio de mascarilla, limpieza constante de manos con agua y jabón o gel antibacterial. Asimismo, el distanciamiento físico de 1.5 a 2 metros y salir de casa en base al calendario de circulación emitido por el Sistema Nacional de Gestión de Riesgos (Sinager).
Después de varios análisis, la “Mesa Multisectorial”, recomendó la reapertura económica, tomando de base los argumentos de distintos sectores. La reapertura encuentra una economía en condiciones precarias, se prevé que mañana se oficialice un decrecimiento mayor al -6.0 por ciento del PIB.
Las unidades productivas padecen de iliquidez, según datos de las gremiales privadas, este año es para olvidarse de utilidades, ya que la tarea se centrará en mantenerse y recuperar más de un millón de empleos perdidos, entre las empresas y economía de subsistencia.
PARA QUÉ MÁS CONFINAMIENTO
Según expertos no hay retorno y se tendrá que avanzar al 40 y 60 por ciento de apertura, ya que para el expresidente de los economistas, Julio Raudales, “el virus continúa y confinarnos va a ayudar muy poco, porque nadie puede con estos fenómenos naturales”.
“La vida continúa, el virus está ahí, y esconderse, meterse debajo de la cama, confinarnos va a servir muy poco para eliminar el virus, el virus está en la naturaleza y se va a quedar por muchos años, probablemente para siempre”, temió.
“Nadie ha podido con la naturaleza, siempre esta ha ganado todas las batallas en 13,000 millones de años que lleva funcionando”, manifestó. Según Raudales, depende de cada hondureño mitigar el impacto del SarCov2, siguiendo las medidas de bioseguridad. La reactivación de la fase 1 de la economía entró en Tegucigalpa y San Pedro Sula a lo que Raudales catalogó como positivo, siempre y cuando la población sea responsable en velar por su salud.
Consideró que “lo que debemos hacer es organizarnos, aprender a defendernos de los fenómenos naturales, en este caso este virus que ha venido a afectar el mundo”. Reconoció que uno “de los grandes problemas actualmente es la poca posibilidad que ha tenido el mercado informal para poder robustecerse, y para poder prestar servicios adecuados”.
Se prevé un mayor movimiento de personas, en la medida que avance la reapertura de a 40 por ciento y se le permita a la población circular más, autorizando dos dígitos diarios de la identidad.
También ampliando los horarios de 6:00 de la mañana, a 8:00 de la noche para darle más tiempo a la gente y que hagan sus compras, principalmente, de alimentos, dado que los mercados de mayor afluencia también empiezan a operar. (JB)
