Esperanza para los hondureños

ZV
/
1 de agosto de 2020
/
12:05 am
Síguenos
  • La Tribuna Facebook
  • La Tribuna Instagram
  • La Tribuna Twitter
  • La Tribuna Youtube
  • La Tribuna Whatsapp
Esperanza para los hondureños

Esperanza para los hondureños

Esperanza para los hondureños, Por: Héctor A. Martínez
(Sociólogo)

La esperanza de los hondureños para gozar de un futuro promisorio está contenida en una frase bastante trillada que reza: “Honduras es un país en vías de desarrollo”. La esperanza, en este caso significa: “Deben esperar a que todo cambie cuando lleguemos a los tan ansiados territorios del desarrollo económico y social”. Lo de territorio, desde luego, es una metáfora etérea porque no he encontrado otro parangón práctico que se le asemeje. Esperanza es lo mismo que decir una economía que crezca, y que la riqueza se traduzca en una mayor distribución de los recursos para la mayor parte de la población. No existe otra vía.

La gente de bajos ingresos vive su día a día con el sentimiento permanente del pesimismo en sus espaldas, como si se tratara de una mochila cargada de rocas pesadas. Los miembros de eso que llamamos, inexactamente, la “clase media”, se afanan por parecerse a los ricos, viviendo con el espantoso espectro de que un día puedan bajar de categoría. Los “clasemedieros” tratan, como decía Desmond Morris en el “Zoo humano”, de parecerse a los privilegiados. Ese es su afán cotidiano. Pero, no hay nada de malo en ello: se llama “Movilidad social ascendente” y todos tenemos derecho a experimentarla hasta alcanzar nuestros propósitos de vida. Son los más afectados por el mal manejo de las crisis del Estado y del mercado, pero ellos apenas lo sospechan. La crisis del Estado significa que los recursos, es decir, los servicios y los bienes provenientes del monstruo hobbesiano no alcanzan para todos; primero, porque el Estado no puede regalar a manos llenas a todo aquel que se le antoje extender la mano; y, segundo, no es un empleador pleno, como bien hubiese querido míster Keynes y los devotos del estatismo y de la Tercera Vía socialdemócrata. Ya bastante hace con mantener contentos a grupos y gremios que, de otra manera, lo extorsionarían en caso de no honrar el pago de estipendios que benefician a transportistas, agricultores, estudiantes, entre otros.

Lastimosamente ese es el pensamiento económico que predomina y que tanto daño nos ha hecho a las generaciones. Porque, para el Estado no resulta fácil satisfacer todas las demandas de los sablistas irresponsables, que casi siempre pretenden establecer una relación de ganar-perder, porque creen que las arcas estatales son una especie de silos llenos de dinero interminable. Para no verse mal frente a los oportunistas organizados que agrupan a miles de agremiados que puedan votar en contra del partido en el poder, los gobiernos se ensartan con préstamos o piden dispensas de deudas para disponer de recursos financieros. O emiten billetes sin respaldo, lo cual, como todos sabemos, implica una inflación de primera.

El otro lado de la moneda no es más consolador: cuando el mercado se niega a crecer debido al conformismo de los empresarios, la economía se mantiene estable o va a la baja, lo cual es grave porque sin crecimiento económico la empleabilidad disminuye y, como consecuencia, el consumo se dirige pendiente abajo, para desgracia de los mismos empresarios y del Estado mismo. Es decir, el poder adquisitivo se reduce y el dinamismo de los mercados, se desploma.

La política de discursos vacuos y repetitivos diluye los ideales. En otras palabras, necesitamos revolucionar nuestra economía para que el Estado pueda cumplir sus limitadas obligaciones y el ciudadano tenga acceso a un buen empleo y a un consumo de acuerdo con su aporte a la productividad. Nada es regalado. Caminar por la vía hacia el desarrollo no es posible sin antes producir la riqueza necesaria. Después se puede regalar a manos llenas. Hasta Marx lo predijo.

Noticias Relacionadas: Hondureños en EEUU piden ser censados para poder votar en 2021

Esperanza para los hondureños

Más de Columnistas
Lo Más Visto