Por: Otto Martin
Existe un viejo principio legal que dice: “Todo ser humano es inocente hasta que se demuestre lo contrario” o, puesto en términos populares, “Todo mundo tiene derecho al beneficio de la duda”.
Claro, también hay otro que dice: “Piensa mal y acertarás”.
Qué hacer, entonces, con toda la incertidumbre y desconfianza desatada en el manejo de los fondos, especialmente los relacionados con la pandemia?
En primer término están los organismos del Estado, creados para supervisar el manejo de los dineros públicos.
Lamentablemente no gozan de toda la credibilidad deseada, vaya usted a saber por qué?
A veces se necesitan supervisores para que supervisen a los supervisores y auditores para que hagan auditoría a los auditores!
En el caso particular de Invest-H, se ha nombrado una comisión interventora para que averigüe qué fue lo que realmente ocurrió.
No puedo dejar de mencionar otro principio político que dice: “cuando quiera enredar algo… nombre una comisión”.
Pero, de nuevo, a esa comisión hay que darle el beneficio de la duda y esperar que lleve y aclare las cosas hasta el punto de “fuera de toda duda”.
No somos nuevos en el asunto de la corrupción y las comisiones.
Bananagate, cuarenta millones de la cuarta urna, Chinazo, Arrozazo, saqueo del Seguro Social, Lapizazo… existen muchísimos azos y gates en la historia de los fondos públicos.
Un exalto funcionario de gobierno estuvo preso por haber hecho negocios con gente del narcotráfico y un expresidente de la República por el delito de soborno, la verdad es que la gente tiene razón de dudar.
Pero, como dije al principio, debe prevalecer el principio de inocencia.
El pueblo debe actuar de manera civilizada, solo con respeto a la ley se puede tener un Estado de Derecho, actuemos con candidez aunque no todos lo hagan.
Qué hacer, entonces, con la gran duda sobre el manejo de los fondos de Invest-H?
Quizá, en un afán de traer paz y tranquilidad al país, los principales funcionarios del gobierno podrían, también, demostrar algo de apertura.
Qué tal si -voluntariamente- el Gabinete de Gobierno en pleno, así como los presidentes municipales, los directores de instituciones descentralizadas, todo aquel sobre el cual pueda caer la duda popular, en un acto patriótico que busque la unidad y la reconciliación del pueblo, con total claridad autorizan a la Comisión de Bancos y Seguros y en general a toda la banca, a que haga público el movimiento de sus cuentas de cheques, ahorros, plazos fijos, etc. de ellos, sus cónyuges y también los de sus hijos, digamos durante los últimos 12 meses?
Honduras merece transparencia, habrá una mejor manera de demostrarla?
Empecé con una especie de refrán y terminaré con otro: “El que nada debe nada teme”.
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