Lipofilling facial con grasa para rejuvenecer el rostro

ZV
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27 de agosto de 2020
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12:01 am
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Lipofilling facial con grasa para rejuvenecer el rostro

Con la edad y envejecimiento facial se va perdiendo grasa, esta grasa colocada de manera ideal brinda un rostro rejuvenecido ya que con los años se van produciendo hundimientos, surcos y pliegues en nuestro rostro que son difíciles de evitar.

El lipofilling facial consigue tratar esas pérdidas de volumen, lo que hago como cirujano plástico es extraer grasa sobrante de alguna parte del cuerpo de mi paciente y la utilizo como relleno facial, además esta grasa es rica en células madre regenerativas, logrando así un rejuvenecimiento evidente en el rostro, dejando una piel más tersa, luminosa y firme.

El lipofilling o lipotransferencia consiste en hacer el relleno facial con grasa propia, obtenida de alguna parte del cuerpo del paciente donde los tejidos adiposos abunden (abdomen, gorditos de la espalda, muslos, flancos, cintura). De esta forma se consigue rejuvenecer el aspecto del paciente, aportando volumen y rellenando surcos y arrugas del rostro: pómulos, mandíbula o surcos nasogenianos. La principal ventaja de usar grasa propia es la facilidad de obtenerla y que esta no produce ningún rechazo ni reacción alérgica al paciente.

La intervención de lipofilling o relleno facial se lleva a cabo en quirófano en un proceso de aproximadamente una hora dependiendo de cada caso con anestesia local y sedación. La operación de lipotransferencia se divide en 3 fases:

Se obtiene grasa del paciente de una zona donde abunde (abdomen, cintura, muslos) mediante una fina cánula.

Las células grasas obtenidas se preparan mediante un proceso de centrifugación, filtración y lavado para separar la parte más sana del tejido, listo para el relleno facial.

La grasa obtenida tras el proceso anterior, se inyecta en las zonas del rostro donde sea necesario: surcos nasogenianos, área temporal, pómulos, mandíbula, arrugas, etc. El tejido graso tiene instinto de supervivencia y los adipocitos crecen y, cuando tienen una medida determinada, propician la creación de otras células que contienen exactamente las mismas características. Así se consigue un relleno facial con grasa propia duradero, sin riesgo de reacciones o de rechazo alérgico.

Además, tienen la capacidad de adaptarse a la nueva parte del organismo donde se implanten. Es decir, nuestro cuerpo “tiene memoria” y nuestras propias células grasas se regenerarán en cualquier zona donde se inyecten, independientemente de su origen con esto logrando un rostro armonioso y juvenil.

Beneficios de los injertos de grasa facial:

1 Te hace ver más joven mediante la restauración del volumen y el soporte de tus tejidos blandos de la cara.

2 La piel luce más radiante, mejora el tono, la textura y la reducción del número y la profundidad de las arrugas en la cara.

3 La textura cutánea, tono y volumen mejorados otorgan una superior apariencia juvenil a la piel.

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