La producción en la pandemia no se detuvo la tierra y el agua, recursos generosos para la vida

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30 de agosto de 2020
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12:23 am
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La producción en la pandemia no se detuvo la tierra y el agua, recursos generosos para la vida

La producción en la pandemia no se detuvo la tierra y el agua

La producción en la pandemia no se detuvo la tierra y el agua, recursos generosos para la vida, Autor: Luis Alonso Gómez Oyuela
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DANLÍ, El Paraíso. La producción en el campo en tiempo de pandemia marcó la diferencia para que el resto de la población tuviera en la mesa los alimentos, necesarios. Es el esfuerzo y trabajo constante de gente laboriosa que a través de los años aprendieron a trabajar solos, sin la ayuda del gobierno, que poco o nada hace en el campo agrícola, ya que toda la inclinación del Estado ha girado en derredor del turismo.

Hoy LA TRIBUNA, comparte a través de este reportaje la experiencia laboral y productiva de una familia que supo abrirse paso en el trascurso de su vida; hoy con mayor entereza, en medio de la pandemia visualizo que el mal no está en la tierra ni en el recurso agua, sino en el comportamiento humano de cómo hacer frente a las dificultades.

Lisandro Sosa y Griselda Talavera, a través de los años han hecho la diferencia entre el conformismo y la voluntad emprendedora para arrancarle a la tierra los frutos para la sobrevivencia familiar y proveer una fuente de trabajo permanente.

Lenín Sosa, listo para llevar al mercado una carga de pepino.

El patrimonio de toda la vida en los 37 años que llevan de casados siempre fue la agricultura. Inicialmente el cultivo de maíz y frijol, siguiendo la tradición, nadie que no viva en el campo deja de sembrar una mata de maíz, frijol, ayote o calabaza, la costumbre ancestral de mayas y lencas, porque en el campo las tradiciones se mantienen vivas.

Con los años descubrimos otro potencial productivo que cambió en cierta forma el rumbo de nuestras vidas, “incursionamos en los cultivos no tradicionales como el tomate, chile, pepino, ayote, zapallo, cilantro y lechuga escarola; producción de peces en menor escala pero con posibilidades de expandir de acuerdo a la demanda. Al inicio sin ninguna tecnología, pero siempre contamos con el asesoramiento de agrónomos especializados, ahora manejamos procedimientos técnicos acordes con las condiciones ambientales.

En los primeros años la mayor parte de los cultivos estaban a la intemperie, bajo los fuertes rayos del sol, las persistentes plagas menguaban los rendimientos de producción incluyendo calidad. Tiempo después llegó la innovación, no más cultivos a la intemperie, lo que hoy, se conoce como agricultura protegida, cubierta por materiales transparentes o semitransparentes, que permite obtener condiciones artificiales de microclima para el cultivo de plantas, flores, hortalizas.

La producción en la pandemia no se detuvo la tierra y el agua
Cultivo de escarola bajo el sistema hidropónico.

Bajo este sistema agrícola especializado se lleva a cabo el control del medio Edafoclimático, alterando sus condiciones (suelo, temperatura, radiación solar, viento y humedad. Esta tecnología, en el caso particular de la familia Sosa Talavera, cuenta con los macro túneles, pequeñas estructuras sencillas y de fácil instalación, económicamente accesible. Esta estructura está conformada por una hilera de arcos, mangueras o alambre grueso. Bajo este sistema, según lo expresado por Sosa, los cultivos mejoraron en calidad y rendimiento productivo, con otro ingrediente; tal como el abono orgánico, evitando de esta forma algunos químicos lesivos para la salud y el medioambiente.

Otro detalle importante en la innovación productiva es el cultivo de hortalizas a través del sistema de Hidroponía, este término se genera de dos palabras griegas: hydro (agua) y ponos (labor o trabajo). “Es un nuevo experimento para la familia Sosa Talavera en su área de cultivos. Actualmente cuenta con un micro túnel para el cultivo de chile y otro para lechuga escarola, este último es una innovación con resultados positivos y buena aceptación en el mercado. La Tribuna, en la página agropecuaria de Carlos Landa, publicó un reportaje completo sobre el cultivo hidropónico de hortalizas.

Para estos empresarios es una nueva experiencia, “contamos con el principal recurso, tierra y agua, elementos vitales disponibles; especialmente el agua, anteriormente el consumo de agua era mayor porque el proceso era por inundación, ahora utilizamos el sistema de riego por goteo con resultados excelentes.

La producción en la pandemia no se detuvo la tierra y el agua
Gricelda Talavera y Lisandro Sosa.

Sobre los rendimientos, dice, que es caprichoso pero, en lo que concierne a su empresa, no se queja porque a través de los años hay mucha experiencia acumulada, “contamos con suficientes áreas cultivadas bajo técnicas agrícolas modernas, lo que hace falta en el campo es voluntad para trabajar porque la tierra es generosa, la tecnología para nosotros fue un giro de 90 grados”.

Consultado sobre los efectos de la pandemia afirma que registró una baja en las entregas de productos a los clientes, particularmente a los supermercados de la capital que inicialmente tuvieron que reducir las compras de producto, las ventas bajaron ostensiblemente porque el principal comprador del producto redujo las compras ya que las entregas las realizaba a domicilio, en la actualidad hay mejoría, situación que nos favorece. En términos generales no consideramos pérdidas mayores porque el excedente de tomate que no se comercializó, lo regalamos a varias instituciones y personas particulares, al final todo es ganancia.

Lisandro Sosa, es dirigente de la Feria del Artesano y productores de oriente. Su esposa Griselda, es miembro activo de la “Feria El Lempirita”, que aglutina a gran parte de productores que cada viernes y sábado eran proveedores de productos a bajo precio al consumidor. Esperan que una vez que pase la crisis actual regresar al negocio, sin embargo, lo que no se vende en el mercado local, lo están realizando en la capital.

La familia Sosa Talavera, está integrada por cuatro hijos: Fany Gricelda, Lenín Lisandro, María Erlinda y Zenia, todos profesionales. Su vivienda es un remanso de paz donde se respira el olor a tierra fértil.

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El chile, bajo el micro túnel, es de excelente calidad.
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Tomate en plena producción.
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Plantación de chile en producción.
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Otro micro túnel para el cultivo de chile, también sistema de hidroponía.

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