Destacan a héroes y heroínas en el 199 aniversario de independencia

Como cada año, Honduras conmemoró ayer martes 15 de septiembre, el 199 aniversario de su independencia de forma atípica, debido a la pandemia del COVID-19 que atraviesa actualmente y que ha dejado luto en las familias hondureñas.

Los actos protocolarios realizados ayer en el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) de Tegucigalpa, fueron presididos por el mandatario, Juan Orlando Hernández junto a la Primera Dama, Ana García de Hernández y diferentes miembros de su gobierno.

En ese acto, se contó con la presencia del alcalde municipal, Nasry Asfura, el regidor Juan Carlos García de Guatemala, la vicealcaldesa Eva del Carmen López de El Salvador, la regidora Josselyn Ardón de Nicaragua y la regidora José Javier Velásquez de Costa Rica.

Luego se procedió por parte de los diferentes jefes de escoltas el recibimiento de los pabellones de Centroamérica por parte de los representantes de las Alcaldía Municipal del Distrito Central.
Junto al Presidente Hernández, lo acompañó la encargada de negocios de Guatemala, Sandra Noriega, la encargada de negocios de El Salvador, Alba López, el embajador de Nicaragua, Juan Ramón Gámez y el embajador de Costa Rica, Mauricio Herrera.

Es de mencionar que los presidentes de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), Rolando Argueta, y el titular del Poder Legislativo Mauricio Oliva, no estuvieron presentes como en otros años en este acto.

“LÍDERES ENAMORADOS DE LA JUSTICIA”

Tras la izada de la Bandera y entonación de las notas del Himno Nacional, el alcalde del municipio del Distrito Central, Nasry Asfura, procedió a la lectura del Acta de Independencia y después de ello, expresó que “rumbo al bicentenario, en medio de una crisis que hemos vivido, alrededor de 2,100 víctimas del COVID-19, han herido nuestros corazones, ha golpeado a nuestro país, pero esos héroes nos han enseñado a convivir cada día de lo que hoy hacemos, cómo podemos sobreponernos y seguir adelante porque todos con nuestro amor y trabajo diario, lo hacemos para el bien de Honduras”.

Asfura remarcó que no solo septiembre es el mes de la patria, es cada día de nuestras vidas, lo que tenemos, sentimos y trabajamos por ella, esa es Honduras, que debemos de hacerlo mejor, con más empeño, sacrificio, sin buscar nada a cambio, sino simplemente cumplir con cada uno de nosotros, hace más de 60 años, voy hacer mías las palabras de Martin Luther King, “necesitamos líderes que no estén enamorados del dinero sino de la justicia”, debemos de agarrar ejemplos firmes de lo que debemos hacer por nuestro país.

“No hay que confundir el silencio con la ignorancia, la tranquilidad con la aceptación, la gentileza con la debilidad, donde todos somos parte de un futuro de Honduras, donde todos debemos de trabajar por ella, lo que hemos hecho en el municipio, solo es dedicarnos a trabajar, no hemos hecho algo extraordinario, servir, cuidar cada centavo de su esfuerzo, de sus impuestos, invertirlos bien, devolvérselos, para que esa confianza que puedan tener, perdure”, señaló.

“HÉROES Y HEROÍNAS”

Posteriormente, el Presidente Hernández destacó en su discurso que “hoy viviendo en el mundo una tragedia sin precedentes, algo tan difícil, es el momento de retomar y profundizar los anhelos de una Centroamérica cercana, hermana, y hoy aquí frente a Francisco Morazán y a este edificio que manda un mensaje de integración centroamericana, le digo a los países de Centroamérica, a sus pueblos, a sus gobiernos, líderes y ciudadanos, Honduras siempre ha tenido esa vocación integracionista, embajadores, y queremos que lleven ese mensaje a cada uno de sus pueblos, somos hermanos y lo seguiremos siendo”.

Dijo que “a las puertas del bicentenario reconocemos el coraje de Lempira y el espíritu indoblegable de nuestro general y paladín centroamericano Francisco Morazán, la sabiduría del sabio José Cecilio del Valle, la honradez del general José Trinidad Cabañas, admiramos ese espíritu reformista del primer jefe supremo de Estado, Dionisio de Herrera, el humanismo de José Trinidad Reyes, gracias a ellos y a tantos hondureños y hondureñas que siguieron su legado esta hermosa patria, país cinco estrellas, esta nación bendecida, seguimos construyendo con coraje, determinación, con amor y pidiendo sabiduría a lo alto, de esta manera de la que estamos viendo hoy es de la que estamos hechos los hondureños”.

“Tenacidad, es la que nos sobra para levantarnos cuando caemos de rodillas, ante la adversidad, los muy jóvenes no recuerdan el impacto del Mitch, muy duro, perdimos muchas vidas, el país quedó destruido en su infraestructura, golpe terrible a la economía, pero hoy viviendo otro impacto económico tres veces mayor que el del Mitch, los hondureños volvemos a decir que estamos de pie, con la frente en alto, y de la mano de Dios, vamos a salir adelante, en el espíritu indoblegable de Morazán y Lempira radica nuestra grandeza, y por ello cito las palabras eternas de nuestro general, la grandeza de una patria, no se mide por la extensión de su territorio sino por la dignidad y el honor de sus hijos”, añadió.

Continuó que “hemos visto sucumbir en esta pandemia, por el COVID-19, a las grandes potencias, a las grandes potencias, con sus sistemas de salud más robustos y sofisticados, ellos cayeron de rodillas, nos tocó ir a la guerra con un frente de batalla que en su primera línea tiene a los héroes y heroínas de la patria, donde está el personal de salud, los que enfrentan esta enfermedad, me refiero a enfermeras, médicos, camilleros, transportistas, todos a los que de una manera aportan su grano de arena para que nuestro sistema de salud esté a la altura de las circunstancias a pesar de cómo lo encontramos, junto a ellos los socorristas, policías, soldados brindando seguridad día y noche.

“Debemos prepararnos y enfrentar esta pandemia pensando en el peor de los escenarios, gracias a ese compromiso de cada hondureño, los pronósticos catastróficos que para junio nos proyectábamos, 3 millones de contagios no se han cumplido, gracias a Dios por ello, sino porque la gran mayoría de los hondureños han puesto de su parte, no bajemos la guardia, enfrentemos esta nueva realidad con disciplina y compromiso”, detalló.

“Mantengamos el pabellón a media asta para recordar que cada hondureño que perdió la batalla está con nosotros o nos están viendo desde el cielo, Dios dé el bálsamo de la resignación cristiana pidiéndole al Creador en nuestras oraciones por los enfermos, por toda Honduras, y toda la humanidad”,

Precisó que en honor a todos los que han fallecido a causa del COVID-19 se compromete a seguir transformando el sistema de salud, “cuando termine esta pandemia, Honduras tendrá un sistema de salud muy cercano a la gente en su atención primaria, muy humano, muy cercano al barrio, la colonia, al caserío, a la aldea, un sistema de instalaciones de centros de salud y hospitales que jamás he visto en la historia, cueste lo cueste, terminaremos con épocas de abandono y acabaremos de raíz con los problemas estructurales que lo convirtieron en un sistema de salud indigno, arcaico e inhumano”. (XM)