Caminantes piden a militares que abran de nuevo el Campo Marte

Decenas de caminantes habituales que usan las instalaciones del Campo Marte, claman por su apertura, que ya cumple más de seis meses de estar cerrado, desde el inicio de la pandemia.

Este predio siempre ha estado en poder de los militares, pero su uso, de manera limitada, también está permitido para decenas de civiles, que día con día, desde las 5:00 de la mañana, utilizan la caminata como un medio de salud.

En los últimos años, desde que el gobierno mejoró ostensiblemente las instalaciones del campo, el número de usuarios se duplicó. Incluso, el fin de semana se permitía departir a las familias en las amplias instalaciones deportivas: canchas de fútbol, baloncesto, montañismo para bicicleta y el “running”.

Asimismo, se invirtió en una buena pista de tierra y otra de arcilla para los corredores y los que trotan, así como los caminantes podían ir y venir por los seis senderos. Las instalaciones remozadas fueron una ganancia para los usuarios de este campo, que ahora están doblemente afectados, están privados del uso de las instalaciones y restringidos para salir a la calle.

Varios de los asiduos parroquianos al parque reclaman que por qué no se abre el Campo Marte, ya que la apertura se está dando para todos, pero no para la salud de aquellos que gozan de caminar y disfrutan del aire libre en unas instalaciones seguras.

LA TRIBUNA consultó con algunas fuentes militares y se han prometido analizar la situación para darle una salida a los reclamos que recibe este rotativo recibe, de parte de los afectados.

Las instalaciones cerradas por la pandemia, si son usadas por los militares, ya que para ellos no están cerradas, el problema es con los ciudadanos civiles, privados por la pandemia de gozar de una buena y saludable caminata.