Aguaceros y vendavales aumentan destrucción en Trojes y alrededores
La Policía Preventiva se presentó a sitios de riesgo para evitar el paso de vehículos y personas por el peligro de los deslaves y crecidas.
Aguaceros y vendavales aumentan destrucción en Trojes y alrededores. DANLÍ, El Paraíso. Una pertinaz lluvia ha caído sobre esta ciudad y alrededores del oriental departamento de El Paraíso, desde las 12:45 de la madrugada de ayer martes, mientras Trojes, El Paraíso y otras zonas fronterizas con Nicaragua han sido azotadas por vientos huracanados y torrenciales aguaceros que provocaron daños en carreteras y viviendas, dejando familias damnificadas previo al ingreso de “Iota” a Honduras.
Desde las montañas de Trojes, en Danlí, El Águila y Guanbuco, en El Paraíso, en Las Manos y Alauca, las familias abandonaron sus viviendas para refugiarse en templos cristianos y centros educativos con el fin de salvaguardar la vida. Los vientos huracanados y las lluvias se llevaron techos de viviendas, árboles, cortaron el paso vehicular y desbordaron los ríos y quebradas en varios puntos del departamento de El Paraíso.
Una humilde familia fue trasladada desde Guambuco, zona fronteriza con Nicaragua. Fue así como una joven madre y sus tres hijos que improvisaron pequeños abrigos con sacos y bolsas plásticas, despiertos desde las 3:00 de la mañana y sin haber ingerido alimento, llegaron al albergue ubicado en la colonia Nueva Esperanza de Danlí.
“Estamos despiertos desde las 3:00 de la mañana, un derrumbe se llevó parte de la casa y nosotros nos metimos a la cocina, cuando amaneció salimos sin nada porque todo lo perdimos, apenas unas ropas mojadas tengo, era triste escuchar como caían los árboles y los olingos aullaban, todos en el suelo porque los árboles casi estaban en el suelo también”, relató Yorlin Ponce, muy triste.
Asimismo, un llamado de ayuda fue enviado por pobladores de Buena Vista, en Trojes, donde diez habitantes de la comunidad quedaron atrapados en la carretera que conduce a Planes, tras un deslizamiento del cerro de La Virgen, a la altura de un trayecto denominado La Rampla. Estas personas se encontraban cuidando las pocas pertenencias que tenían en las viviendas que hasta hace poco estaban en pie y se desconoce hasta ahora si fueron rescatadas.
De igual forma, cuatro miembros de una familia estuvieron a punto de morir ahogados cuando el automóvil en que se transportaban fue arrastrado por un río crecido, a la altura de la aldea Los Terrones, en la ruta hacia Cuyali, pero afortunadamente fueron auxiliados y lograron salir ilesos del percance.
Anoche se daba por un hecho que al final del paso del huracán y tormenta tropical “Iota”, por el oriente hacia el sur hondureño y la República de El Salvador, habrá un recuento de severos daños, entre inundaciones, destrucción de viviendas e infraestructura vial y pérdidas de cultivos y hatos ganaderos, sobre todo por lo vulnerable que dejo al país el reciente huracán “Eta”. (CR)
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