PELEA DE GIGANTES

ZV
/
3 de diciembre de 2020
/
12:08 am
Síguenos
  • La Tribuna Facebook
  • La Tribuna Instagram
  • La Tribuna Twitter
  • La Tribuna Youtube
  • La Tribuna Whatsapp
PELEA DE GIGANTES

CAPITALINOS Y EL AEROPUERTOLO DOMÉSTICO Y LA SOLIDARIDAD

EL uso de las redes sociales, y aquello que los gigantes tecnológicos permiten divulgar por medio de sus portales, ha desatado un acalorado debate en los Estados Unidos. Los propietarios de las plataformas son inmunes ante la ley por lo que terceros divulgan haciendo uso de sus portales digitales. Ya sea material ofensivo o ilegal. Así que cuelgan cualquier cosa, sin atención alguna a la veracidad. Incluso, ninguna responsabilidad asumen, aunque el contenido sea calumnioso, injurioso o denigrante al honor de las personas o fraudulento. El conflicto ha ido escalando. Encendido, particularmente, por la naturaleza de los mensajes enviados desde la Casa Blanca vía sus cuentas digitales. Ambas caras de la tortilla mejor se explican a la luz de lo expuesto por los pesos pesados, –Trump y Obama– con puntos de vista diametralmente opuestos. Empecemos con los antecedentes.

Facebook adoptó como política dejar decir y dejar pasar. Ello es no suprimir, ni corregir ni llamar la atención sobre ninguno de los mensajes transmitidos por su red, independientemente de cuan dañino al público o inverosímil sean. Ello originó una marea de críticas contra Mark Zuckerberg, tras su negativa de suprimir unos controvertidos comentarios de Trump. Twitter en cambio, fijó una posición distinta, sometiendo los mensajes a verificación. Sin embargo, con el pasar de los días, la posición original en Facebook varió ligeramente. Ambas redes han desatado la ira del Salón Oval, después que comenzaron a censurar publicaciones del presidente en las que afirmaba –bien sin pruebas o con alegatos dudosos– haber perdido las elecciones por un masivo fraude electoral montado. Obama, por su parte, ha mostrado preocupación por la propagación de falsedades en los medios sociales. “Hay medios –recién dijo en una entrevista–imitando locas conjeturas, las acusaciones de fraude sin ningún apoyo de evidencia a los reclamos”. “Muchas personas están absorbiendo y creyendo eso”. “El desafío es que la Casa Blanca retorne a las normas y estándares acostumbrados”. “Pero se ocupará una conversación sensata y presión a las empresas que manejan portales de redes sociales”, “sabemos que todos tenemos que encontrar una manera de averiguar y regresar al punto de comprender que la verdad significa algo”, “que no se puede inventar cualquier cosa y hacer que la mitad del país lo crea”. “Es algo que requerirá más que de un esfuerzo gubernamental”.

En cambio Trump, ofendido, aduce que ha sido víctima de una gran censura. Que las empresas le violan su libertad de expresión ya que asumen decisiones editoriales sobre lo que permiten, lo que evitan y lo que rotulan. Amenaza con vetar el proyecto de ley de financiación militar del 2021 a menos que el Congreso derogue la ley que protege el estatus de las redes sociales”. Sostiene que esas plataformas lo desfavorecen políticamente. “La sección 230 de la Ley de Decencia en las Comunicaciones (la ley del blindaje) otorga inmunidad a las empresas tecnológicas para que no se emprendan acciones legales en su contra por el contenido publicado por sus usuarios”. Aquí, el criterio de POTUS en sus propias palabras: “Por lo tanto, si la muy peligrosa e injusta sección 230 no se termina completamente como parte de la Ley de Autorización de Defensa Nacional (NDAA), me veré obligado a VETAR inequívocamente el proyecto”. “Las mayores empresas tecnológicas se han encontrado bajo el fuego de ambos lados del espectro político estadounidense, demócrata y republicano, por su manejo de los contenidos durante la amarga campaña presidencial de este año”. Biden también piensa que la sección de la ley debe ser revocada –pero por razones distintas a las de Trump– ya que ello estimula la propagación de falsedades.

Más de Editorial
Lo Más Visto