La crisis económica ha deprimido los alquileres comerciales y de viviendas.
El sector alquileres padece los efectos de la crisis económica por pandemia y huracanes tropicales, a tal grado que algunos propietarios han sacado por la fuerza a los arrendatarios por falta de pago.
El director administrativo de Inquilinato de la Secretaría de Gobernación, David Mejía, explicó que durante este tiempo “han sucedido muchos problemas en el sentido que las empresas cerraron y algunos inquilinos quedaron sin empleo y por eso han dejado de pagar la renta”.
“A tal grado que en este tiempo de pandemia llegaron a deber de cinco hasta seis meses”. Contó que, ante esta situación, “lo que hemos estado haciendo es concienciar al arrendador y que lleguen a un acuerdo con el inquilino una vez al mes”.
Algunos propietarios han tenido piedad bajando las cuotas vencidas y mensualidades, pero otros arrendatarios les han sacado los cachivaches a los inquilinos a la calle después de esperar el pago.
En los locales comerciales las disminuciones han sido de 50 por ciento, dado que el comercio ha estado cerrado, relató Mejía. En lo relacionado a viviendas “ahí sí que no ha habido ninguna rebaja. Lo que ha habido es que el arrendador ha recibido pagos diferidos de seis meses y un año”.
Explicó que hay casos de arrendadores que viven de las rentas o tienen comprometidos esos ingresos con los bancos. Agregó que se han dado “muchos casos” en los que el arrendatario ha confiscado el menaje de los inquilinos por falta de pago.
Pero consideró que esos extremos están fuera de la ley, ya que, para ello, se debe iniciar un proceso: “Durante la pandemia se han dado unos 200 casos”, apuntó el funcionario. (JB)
