Premio “Salvador Morales” para dos técnicos automotrices por su solidaridad y heroísmo en tiempos de pandemia y desastres naturales

ZV
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18 de enero de 2021
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06:00 am
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Premio “Salvador Morales” para dos técnicos automotrices por su solidaridad y heroísmo en tiempos de pandemia y desastres naturales

El trabajo de los técnicos automotrices es tan importante como el de un médico, un ingeniero, un diseñador o un arquitecto. Visitar un taller para revisar su vehículo, es como buscar un seguro de vida que no se contrata, ni se paga igual, pero es una decisión que no se debe tomar a la ligera, porque es en las manos de ese profesional donde se confía la vida, no sólo suya, sino de su familia.

Es un oficio en que la precisión, el detalle, la honestidad, el esmero y la previsión son primordiales para garantizar la seguridad de cada conductor. Una labor muy demandante, que muchas veces es poco reconocida.

Precisamente para reconocer la vocación de servicio, la creatividad y el heroísmo de los talleristas, Super Repuestos creó el “1er. Premio Salvador Morales al Técnico Automotriz del Año”, en Honduras y El Salvador, países en los que la empresa tiene presencia.

Este reconocimiento tiene por objetivo resaltar las bondades, de dos destacados profesionales de este noble oficio que convirtieron los retos y dificultades del 2020, en una oportunidad para demostrar que siempre se puede tender la mano y ayudar a otros, aun cuando nosotros mismos estemos pasando por momentos difíciles.

Así es, Jorge Velásquez, de Autoservicio El Prado, de Honduras y Ricardo Recinos, de Taller Richard, en Sonsonate, El Salvador, quienes cuando sus talleres se encontraban cerrados por la crisis sanitaria provocada por el Covid-19 y mientras su economía estaba fuertemente afectada, decidieron tender la mano a los demás, convirtiendo sus días, no de pérdidas, sino de ganancias, por la satisfacción de sentirse útiles, manteniendo vehículos en marcha.

Aunque Velásquez y Recinos estaban en diferentes países y escenarios distintos, les unía un objetivo: tender una mano a quien lo necesitaba y en vez de sentarse a resentir la pandemia por la que atraviesa el mundo, estos profesionales honestos y padres de familia fueron protagonistas de crónicas de solidaridad, amor al prójimo y de satisfacción personal, lo que les valió para ser dignos acreedores al “1er Premio Don Salvador Morales al Técnico Automotriz del Año”.

Jorge Velásquez, ganador del “1er Premio Salvador Morales al Técnico Automotriz del Año”, otorgado por Super Repuestos.

Devolviendo esperanza

Don Jorge, propietario de Autoservicio El Prado, en Tegucigalpa, Honduras, acostumbrado a asegurar la vida de sus clientes a través de su labor como técnico automotriz, estaba desempleado, no tenía ni un cliente, pues las puertas de su taller estaban cerradas a causa de la cuarentena; le entristecía ver como miles de familias sufrían problemas económicos y de salud. Si esa situación ya era dolorosa para él, en octubre del 2020 dos monstruos marinos llamados tormentas Eta e Iota, llenaban aún más de luto, pobreza y aflicción a miles de compatriotas, que vieron como las embravecidas aguas se llevaban lo que les había costado una vida obtener.

Ante tan desgarrador escenario, don Jorge, acostumbrado a tender la mano, pensó en ayudar desde su trinchera y publicó en sus redes sociales un anuncio llamando a todos los residentes en la capital, cuyos vehículos habían sido dañados por las inundaciones. “Estoy poniendo todos mis talentos que Dios me ha regalado en este bello oficio de mecánica automotriz, para ayudar a las personas necesitadas en momentos como los que estamos viviendo todos los hondureños, por lo cual estaré ayudando al más necesitado en la reparación gratuita de su vehículo inundado, puede comunicarse con nosotros para coordinar su reparación. Juntos de la mano de Jesucristo saldremos adelante de esta situación”, ofrecía el noble catracho.

Así comenzaron a llegar a su taller personas con vehículos que tenían los motores atascados de lodo, en los que Don Jorge comenzó a trabajar hasta repararlos por completo, demostrando que no todo en la vida tiene que ver con dinero, puesto que lo hizo sin cobrar un centavo.

“En el transcurso de este 2020 hemos tenido cualquier cantidad de situaciones que afrontar: la pandemia del Covid-19 y los huracanes. Todos lo hemos sufrido, pero esta, no es razón para dejar de apoyar, ¡al contrario!”, aseveró Velásquez.

Son muchas sus anécdotas con clientes y muchas las historias de la manera en la que su servicio ha marcado positivamente la vida de los miembros de su comunidad. Muchos encontraron en las manos de Don Jorge, no sólo a un hábil mecánico, sino a un hombre honesto, comprometido y dispuesto a hacer el bien.

Jorge Velásquez y su equipo de trabajo en su taller Autoservicio El Prado, en Tegucigalpa.

Ayudando a salvar vidas

A un poco más de 428 kilómetros de Tegucigalpa, en Sonsonate, El Salvador, otro tallerista con corazón de oro y valor de superhéroe hacía lo suyo dejando a un lado su gabacha de técnico automotriz, para ponerse un uniforme blanco, con una Cruz Roja, como escudo, para ayudar a salvar las vidas de los enfermos de Covid-19.

Nos referimos a Ricardo Recinos, quien durante los primeros meses de la pandemia fue auxiliar de médicos, ayudando a trasladar pacientes hacia los hospitales más cercanos en Sonsonate. Su vocación de servir y de estar dispuesto para ayudar las 24 horas del día, 7 días de la semana, son virtudes que demuestran su solidaridad con el prójimo, mérito primordial en su oficio de mecánico, el cual ejerce desde hace 35 años: Además, este altruista salvadoreño es voluntario de la Cruz Roja Salvadoreña desde hace 17 años.

Para don Ricardo, no hay fórmulas para ganar un premio, su sencillez, su deseo de servir bastaron para galardonarlo. “Nosotros servimos con amabilidad con responsabilidad, carisma, para atender a quién más lo necesite y lo hacemos en nuestro taller a través de los vehículos. Como gremio, nos necesitamos entre todos, para seguir aprendiendo y apoyándonos, si uno no sabe algo el otro lo sabe y así nos complementamos”, manifestó Recinos al saber que había ganado el premio “Salvador Morales”.

“Sigámonos esforzando a seguir siendo un eslabón más para la sociedad, luchar por un mejor país, esto es un impulso para pensar en ayudar, ser más responsables en nuestros trabajos, es un compromiso. Ser el técnico automotriz del año es una gran responsabilidad a ser mejores”, afirmó don Ricardo Recinos.

Don Jorge reparó gratis varios vehículos con motores dañados por el lodo, producto de las inundaciones causadas por las tormentas Eta e Iota.

Premio Salvador Morales

El “1er Premio Don Salvador Morales al Técnico Automotriz del Año, nace por el deseo de Super Repuestos de hacer un reconocimiento especial para galardonar al técnico automotriz del año, basado en virtudes, en cómo destacados profesionales de este oficio realizaron ayuda comunitaria destacada y loable en momentos claves para Honduras y El Salvador.

Fue así que tomando en cuenta valores como: habilidad, humanidad, pasión por los vehículos, capacidad de liderazgo, servicio, heroísmo, responsabilidad, honestidad, profesionalismo, paciencia, compromiso y simpatía.

Fueron los mismos clientes, amigos y gerentes de los almacenes de Super Repuestos, en Honduras y en El Salvador, los que postularon a estos destacados talleristas en cada país, a quienes consideraron no sólo por su trabajo al reparar vehículos, sino por su labor social en beneficio de sus comunidades. El premio se entregó en su primera edición el pasado 22 de diciembre durante un significativo evento, en el cual, Jorge Velásquez y Ricardo Recinos recibieron un premio económico, canjeable en herramientas de Super Repuestos, que les ayudará a seguir mejorando sus talleres, además de un trofeo y diploma de reconocimiento, que los acredita como los primeros ganadores de tan importante premio.

Ricardo Recinos, propietario del Taller Richard, en Sonsonate, El Salvador, fue el acreedor al “1er Premio Salvador Morales al Técnico Automotriz del Año”.

¿Quién era Salvador Morales?

Salvador Morales fue el fundador y propietario del Servicio Automotriz Morales, un negocio familiar fundado hace 43 años en el centro histórico de San Salvador. Don Salvador fue un mecánico y un padre ejemplar, un personaje enfocado en el servicio y en su familia.

Murió de Covid-19, pero su legado trasciende a tres generaciones a quienes heredó el esfuerzo, el sentido de mejora continua y el valor del trabajo para la comunidad.

No todos los héroes usan capa, don Salvador usaba gabacha y herramientas, pero también formó a una nueva generación de salvadoreños que ahora son parte de los equipos de primera línea en atención de la pandemia. Una súper historia, entre muchas que vale contar.

Enseñó a sus hijos a que igual que en un motor, la vida tiene una mecánica donde cada pieza es importante para que todo marche bien. Decía que un buen trabajo no sólo consiste en arreglar carros, sino en proteger a las familias que se conduzcan en el.

Fue así como Super Repuestos instituyó este premio donde participaron las historias de talleristas más destacadas, heroicas y que también mostraron acciones de ayuda, que impactaron a otros, en un año que marcó la vida del mundo, reconociendo valores y virtudes que un técnico automotriz demuestra en el día a día y, sobre todo, enalteciendo el servicio sin reservas a la comunidad.

Don Jorge ofreció en las redes sociales sus servicios gratuitos a los capitalinos que habían sido afectados por Eta e Iota.
Don Ricardo ejerce desde hace 35 años el noble oficio de técnico automotriz y 17 siendo voluntario de la Cruz Roja Salvadoreña.
El ganador del Premio Salvador Morales al Técnico Automotriz del Año 2020, de El Salvador, junto a su familia.
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