Manifestantes asociados al movimiento Antifa destrozaron las ventanas en la sede del Partido Demócrata en Portland, Oregon, quemaron banderas estadounidenses en Denver, Colorado, y vandalizaron tiendas en Seattle, Washington, horas después de la investidura de Joe Biden y Kamala Harris.
Los amotinados ocuparon el papel violento que el pasado 6 de enero ejercieron seguidores de extrema derecha del presidente saliente Donald Trump cuando irrumpieron en el Capitolio federal.
Sin embargo, a pesar de las amenazas en redes sociales por las pasadas semanas para hacer lo mismo en la toma de posesión, no se reportaron incidentes hasta los de entrada la tarde del miércoles que se le atribuyen a Antifa.
En Oregon, policías federales se vieron obligados a lanzar gas a los manifestantes en un intento por dispersarlos. Anoche, el grupo además lanzaba rocas y huevos al edificio de Inmigración y Adunas en Portland.
El reporte de la agencia Efe precisa que unos 150 manifestantes vestidos de negro llegaron a la sede local del Partido Demócrata, donde además llenaron de pintura la estructura.
Mientras algunos de ellos vandalizaban el edificio, otros trataban de proteger a sus compañeros de ser grabados por las cámaras de seguridad, tapándolas con paraguas.
La Policía arrestó a algunos manifestantes, a los que se les confiscó una arma de fuego, cuchillos y postes de metal, según informó el medio local Katu News. De acuerdo con el reporte, uno de los manifestantes intentó quitarle la bicicleta a un policía cuando este le quitó una arma blanca de gran tamaño.
Los manifestantes llevaban una pancarta que leía “No queremos a Biden, queremos venganza” con el símbolo de anarquía y armas pintadas,
En otro cartel se podía leer “Somos ingobernables”.
¿Qué es Antifa?
El grupo ha sido catalogado por analistas como una organización de izquierda o de extrema izquierda que lucha contra el fascismo. Sus miembros se han enfocado en luchar contra la ideología de extrema derecha, más que en promover acciones que representen a un sector político específico.
Con un discurso anticapitalista, sus tácticas han sido relacionadas con las de grupos anarquistas, más que con la izquierda tradicional.
En este sentido, según destaca un reporte de BBC Mundo, Antifa no descarta el uso de la violencia como un método válido para protestar en las calles, incluyendo la destrucción de propiedad privada, e, incluso la violencia física contra sus oponentes. (eldiariodeny)
