Todo se lo llevaron Eta e Iota, pero con 100 “pesos” diarios mantiene a su hijo

ZV
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19 de marzo de 2021
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05:00 am
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Todo se lo llevaron Eta e Iota, pero con 100 “pesos” diarios mantiene a su hijo

Desde temprano, ambos se ponen a vender en una esquina de la segunda avenida.

Hoy es el Día del Padre, y pese a que la paternidad se ha vuelto un dilema, por el tema de la irresponsabilidad que impera en un número elevado de hombres, todavía existen padres dignos de admirar y que día a día luchan contra todas las adversidades a fin de sacar adelante a sus hijos y soñar con hacerlos hombres y mujeres de bien.

Es el caso de don Cruz Mejía, quien a sus 51 años hace honor a la palabra “papá”, pues luego de ser abandonado por su compañera de hogar, hace más de tres años, ha criado solo a su niño Dylan Isaac Mejía, quien en ese entonces tenía tan solo seis meses de nacido.

En una esquina de la primera calle, 2 avenida del barrio Concepción de esta ciudad, exactamente frente a Piñatas Party, se puede apreciar cómo el amoroso padre, junto a su pequeño hijo, quien el próximo mes de junio cumple sus cuatro años, venden diversos productos en una mesa improvisada, actividad que hace cuatro años ha sido el medio de sustento de este inseparable dueto.

Un momento de no venta, es adecuado para peinar al bebé.

“Me despierto a las cinco de la mañana para prepararle el pepito al niño, con eso vuelve a quedarse dormido hasta las 7:00 que se despierta de nuevo para alistarnos y salir para este lugar a vender”, dijo explicando la rutina de las mañanas previo a retomar sus labores de comerciante.

Mejía contó que no ha sido fácil criar a su vástago, pero que es su motor para que cada vez que se levante, luche en salir adelante y darle lo mejor que pueda, “mi niño es mi todo y es lo más preciado que tengo en la vida”.

“Yo lo he criado solo desde los seis meses, y desde entonces yo lo he cuidado cuando se enferma, le he dado su comidita a la hora, lo baño, le preparo sus pepitos, le mando a lavar su ropita”.

“Puedo decir que han sido años complicados, pero gracias a Dios hemos salido adelante juntos a pesar de haber perdido todo en las inundaciones”.

Lo mantiene bien alimentado.

Esta familia de dos, fue una de las tantas víctimas de los estragos ocasionados por las tormentas tropicales Eta y Iota.

Lo perdieron todo en el sector de Omonita, El Progreso, Yoro y ahora, de las ventas diarias, pagan una habitación en un sencillo hotel en esta ciudad a fin de poder dormir bajo un techo.

“Hay días que no vendo nada y cuando eso pasa con pena, pero me toca pedir y con eso le compro la lechita al niño y la comidita, aunque sea a él. El señor del hotel me ayuda también y me hace espera para poder recoger el dinero del cuarto”, acotó con sus ojos llorosos.

Todo le llevaron Eta e Iota, pero no el amor a su hijo.

BIENVENIDA

Mejía aseguró que cualquier ayuda es bienvenida, pero lo que más quisiera es tener un lugar propio donde vivir, “yo pido que si alguien me da la oportunidad de un solar pequeño para pagarlo de apoco, sería lo mejor ya que no me gustaría seguir con el niño de arriba abajo”.

“También que, si gustan, pueden apoyarme con ropita, zapatos, leche, pues se toma tres pepes al día”.

Cien lempiras de ventas diarios es lo que necesita hacer este ejemplar padre a fin de poder salir con los gastos básicos de ambos.

Si desea apoyarlo, puede abocarse a la antes mencionada dirección y adquirir de los productos que comercializa. Refrescos, agua, golosinas, entre otros productos ofrece.

DATO
“Yo deseo tener vida por muchos años más y también salud para seguir luchando y darle estudio para que sea una gran persona y que sea un hombre de bien, honesto y que sepa que en la vida las cosas se ganan trabajando”.

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