Aquí, en esta Honduras de nuestros tiempos, más bien vamos para atrás. Digo esto porque resulta inexplicable, o más bien sospechosos de algo grueso, monumental, que están tramando contra la institucionalidad democrática.
Recuerdan que en los sesentas y setentas, los resultados de las elecciones se transmitían por radio a puro telegrama desde los más apartados municipios de nuestro territorio nacional? Nadie andaba con las tales encuestas, bocas de urnas y tanta pajarita que se han inventado ahora, que solo son “mikis” tecnológicos para hacerle la ponga a medio mundo.
A las 3 ó 4 de la mañana de los lunes ya sabíamos quién era el nuevo presidente y punto. Y entonces?
Esteban González P.
Colonia Kennedy
Tegucigalpa, M.D.C.