Patrulleras interoceánicas trabajan en la lucha contra el narcotráfico

Las patrulleras interoceánicas Lempira y Francisco Morazán, compradas por la Fuerza Naval de Honduras a Holanda, continúan trabajando en la lucha frontal contra el narcotráfico, informó el portavoz de las Fuerzas Armadas, teniente José Coello.

“Se ha hecho un recorrido en las dos embarcaciones de la Fuerza Naval de Honduras, donde se han confirmado que ambas están en perfecto estado. Las dos embarcaciones están cumpliendo a cabalidad las operaciones orientadas al combate al narcotráfico, crimen organizado, ejercer soberanía y las diferentes operaciones”, detalló Coello.

Al tiempo que indicó que las embarcaciones interoceánicas Lempira y Francisco Morazán su sede es la Base Naval de Puerto Cortés y desde ahí cumplen diferentes misiones.

“Se ha verificado el correcto mantenimiento y uso. Hasta el momento las embarcaciones están en perfecto estado a través del mantenimiento que hace la Fuerza Naval y la empresa holandesa que fue la que las vendió, que hasta el momento han permitido que se cumpla a cabalidad con las acciones de soberanía y el combate que ellos hacen al narcotráfico en su mayoría”, señaló.

La Fuerza Naval de Honduras adquirió las dos patrulleros y seis lanchas interceptoras de alta velocidad por un monto de 62 millones de dólares, en arrendamiento por 13 años, con opción de compra y cuyo plazo puede ampliarse hasta 20 años.

El contrato fue aprobado a finales de octubre de 2012 por el Congreso hondureño a través de la empresa Servicios Marítimos Internacionales Sociedad Anónima de Capital Variable, creada en mayo de ese año.

Estas patrulleras se involucran en la identificación, intercepción y asegurar embarcaciones sospechosas que podrían transportar estupefacientes.

Por su parte el capitán de navío, Juan de Jesús Rivera, destacó que en el año 2023 finaliza el contrato de arrendamiento y las naves pasarán a control total de Honduras.

“Estas embarcaciones son muy modernas, cuentan con sistemas PLC de computación. Cuentan con dos máquinas caterpilar y dos generadores 4.4, tiene una capacidad de al menos 9 mil galones de combustibles”, señaló Rivera.

Asimismo, indicó que las máquinas necesitan cada determinado tiempo un mantenimiento en astilleros nacionales.

“Cada embarcación tiene su tiempo de mantenimiento preventivo. Las dos naves han estado en función, y como todo sistema que pueden fallar y necesitan cambios en ciertas piezas y eso es normal, nosotros lo pedimos a Europa y a veces eso demora en llegar”, manifestó Rivera.