Jefe FNAMP: ‘las maras y pandillas han cambiado sus maneras de cometer delitos’

Si el crimen organizado recurre a todo tipo de actividades para evadir los controles de seguridad, de igual manera la institucionalidad emplea nuevas estrategias para contrarrestar esas acciones y evitar hechos violentos en el país, manifestó hoy el jefe de la Fuerza Nacional Anti Maras y Pandillas (FNAMP), coronel Amílcar Hernández.

El titular de la FNAMP aseguró que la institucionalidad está lista para seguir a la caza de las mentes criminales y los delincuentes que violen la ley, porque lo primordial es brindar paz y tranquilidad a la población, según la solicitud expresa del presidente de la República, Juan Orlando Hernández.

El coronel Hernández señaló que “las maras y pandillas han cambiado sus maneras de cometer delitos y, por lo tanto, nos hemos visto obligados a redireccionar las estrategias para ser más efectivos y lograr el debilitamiento de las organizaciones de las redes criminales, principalmente enfocados en los delitos que este tipo de grupos cometen ante la población”.

Refirió que se hace un trabajo de inteligencia en el marco de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina) y que la coordinación entre entidades como el Sistema 911, la línea de denuncia 143 y la Dirección Nacional de Investigación e Inteligencia, entre otras, ha permitido “efectuar un trabajo y una estrategia firme para identificar las innovaciones que realizan los grupos criminales”.

“Es importante contar con los recursos necesarios para poder hacer frente al crimen, y los hemos tenido”, dijo el coronel Hernández.

Manifestó que “la FNAMP debe ser más dinámica, aprovechar en mejor forma la herramienta legal con que se cuenta, así como fomentar la cultura de la denuncia, como ha venido sucediendo en los últimos años”.

Desmantelan red de llamadas telefónicas

El director de la FNAMP destacó el desmantelamiento que se realizó en predios cercanos a la cárcel de Ilama (Santa Bárbara), más conocida como El Pozo 1, de una red tecnológica de desvío de llamadas que permitía que los privados de libertad hablaran con normalidad por teléfono desde el interior del centro penal.

Ese trabajo permitió desmontar varias antenas, decomisar computadoras, carros todoterreno y otro tipo de elementos que permitían que los reclusos pudieran seguir realizando llamadas desde el interior, pese a que se habían instalado bloqueadores de señal en distintos sectores del centro penitenciario.

Los criminales hasta habían contratado profesionales de la comunicación para instalar el equipo y de esa manera continuar operando por medio de llamadas telefónicas desde el interior de El Pozo 1, cárcel en la que se encuentra confinada una gran parte de las estructuras criminales a nivel de líderes o cabecillas.

Se confirmó que era tan sofisticado el sistema que utilizaban los grupos criminales que las autoridades se han replanteado implementar una serie de estrategias que permitan adelantarse a esos delincuentes, y parte de esos resultados ya se están viendo.

El presidente Juan Orlando Hernández, a inicios de febrero pasado, presentó ante el Congreso Nacional un proyecto de decreto encaminado a fortalecer el trabajo de la institucionalidad hondureña en su lucha contra el crimen organizado, y en especial contra las maras y pandillas.

“Vamos a combatir al crimen organizado y al narcotráfico hasta el último día de mi Gobierno, y lo vamos a hacer porque lo más importante es que el pueblo hondureño pueda vivir en paz y tranquilidad”, dijo Hernández en esa ocasión ante el Poder Legislativo.

Respuesta del crimen

Según el jefe de la FNAMP, al verse acosado por la institucionalidad, el crimen ha decidido migrar a otras actividades o se ha visto en la necesidad de volver más sofisticadas sus operaciones, al grado que han invertido una gran cantidad de recursos que obtienen de actividades ilícitas.

“Ahorita están lavando activos en este tipo de actividades, pero ya hemos pegado el primer gran golpe”, sentenció el coronel Hernández.

Expuso que “las instituciones no nos hemos quedado de brazos cruzados y hemos logrado incluso fracturar algunos esquemas y otros los hemos desintegrado”.

También destacó que estos grupos del crimen “logran migrar por la cantidad de recursos que tienen y ahora ya no solo se habla de narcotráfico, sino de microtráfico”, sin dejar de mencionar la extorsión, ahora con nuevos métodos, pero los que ya se tienen también plenamente identificados.

El jefe de la FNAMP reconoció que si el Estado no es dinámico en el uso de las tecnologías, entonces sucederá que muchos delitos cometidos por los grupos criminales quedarán en la impunidad.

También dijo que es fundamental “conocer las amenazas que estamos enfrentando”, y ante eso el trabajo que realiza toda la institucionalidad es más que importante si se logra confirmar, por ejemplo, cómo están operando los sectores criminales y las diversas formas que se puedan realizar para evitar los delitos, debilitar o eliminar las estructuras que han montado.

Descubierta y desarticulada red tecnológica

El coronel Hernández también señaló que gracias al esquema de inteligencia en los últimos meses se logró desarticular una red tecnológica que permitía a los grupos criminales evadir algunos problemas legales, así como solventar gran parte de los imprevistos que pudiesen tener algunos de sus miembros.

En otras palabras, la red tecnológica permitía que los criminales o delincuentes que cometían actos ilícitos, al ser capturados, no tuvieran en su poder pruebas incriminatorias que los llevaran a afrontar procesos legales.

“El trabajo que ahora hacen es muy sofisticado”, destacó Hernández, por lo que “se requiere de mucha más labor de investigación para adelantarse a prevenir los delitos”.

Según el coronel Hernández, lo más importante es que el mando estratégico ya tiene conciencia de lo que se está afrontando en materia de crimen organizado y las nuevas tecnologías, y por lo tanto han estado dispuestos a colaborar para adquirir el equipo y contar con los recursos necesarios para afrontar la migración de los grupos criminales a otro tipo de actividades.

Finalizó diciendo que el trabajo contra las maras y pandillas sigue siendo tratado de manera integral y permanente, “sabiendo que son importantes las labores que se hacen en los centros penales, así como en la Fuerza de Seguridad del Transporte, por poner algunos ejemplos, porque en la medida que se amplían las acciones en toda la institucionalidad, menos posibilidad tendrá el criminal de poder actuar”.