El bombero de 82 años que desafió a la tormenta Eta para salvar vidas

ZV
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8 de mayo de 2021
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05:40 am
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El bombero de 82 años que desafió a la tormenta Eta para salvar vidas

Roberto Rodríguez Borjas, excomandante general del Cuerpo de Bomberos de Honduras.

A sus 82 años de edad, cuando la tormenta tropical Eta azotaba el Valle de Sula, el excomandante general del Cuerpo de Bomberos, Roberto Rodríguez Borjas, navegó en su lancha por las calles inundadas de la colonia La Planeta, para salvar la vida de decenas de personas.

No le tuvo temor a las aguas embravecidas que se habían “tragado” las casas ni pensó en el enorme riesgo que corría de contagiarse con COVID-19. Su deseo de ayudar fue más fuerte…Dos meses después dio su último aliento, víctima del mortal virus.

Este “catracho” valiente que hoy es el protagonista de la sección Ángeles de la Pandemia desplegó las alas de la nobleza y la solidaridad por amor al prójimo.

Nació en San Pedro Sula un 31 de diciembre de 1938, en el hogar conformado por Juan Rodríguez y Eulalia Borjas, rodeado por sus hermanas Lidia, Rosa, Edith, Guadalupe y Teresa, siendo el único varón.

Su hermana, Edith Rodríguez Borjas, recuerda entre lágrimas y risas que de niño era muy inquieto, un hijo amoroso, un alumno brillante y a veces, “hasta se enamoraba de sus maestras” en la escuela.

A sus 82 años, el excomandante general de Bomberos, Roberto Rodríguez Borjas, dio un ejemplo de valentía y nobleza, al rescatar en su lancha a familias afectadas por la tormenta Eta.

MANDADOS A CABALLO

A los 12 años de edad, ya andaba a caballo, cargando un rifle 22 con el que tenía bastante puntería; al galope, hacía mandados en las comunidades vecinas y disfrutaba su vida “en el monte”, como solía decirles a sus hijos.

En el Instituto José Trinidad Reyes, donde se graduó de perito mercantil, su liderazgo lo llevó a ser presidente de curso, a organizar el coro de la Estudiantina y a recaudar fondos con los que luego compraron los instrumentos musicales de la primera banda de guerra del colegio, “un espectáculo” en aquel entonces.

En 1960, cuando el Cuerpo de Bomberos apenas se estaba organizando en San Pedro Sula, el joven Roberto, motivado por su naciente vocación de servir, se integró a la institución.

Más tarde, entre tajos de carne, afilados cuchillos y el ir y venir de amas de casa cargadas con bolsas, conoció a una linda chica que le robó el corazón: Adelfa Marcos Guerra, a quien tiempo después llevó al altar, vestida de blanco, convirtiéndola en su esposa. Procrearon cuatro hijos: Allan Roberto, Denis Orlando, Herby Ernesto y Lourdes Suyapa.

Su hijo, Allan Roberto Rodríguez Marcos, relata que “mi papá y mi mamá se conocieron en el barrio Medina, porque el abuelo allí tenía una carnicería”.

Con el paso de los años, mientras sus hijos crecían, Rodríguez Borjas se enamoró de su carrera, apagó innumerables incendios, continuó su formación bomberil en Costa Rica, México, Estados Unidos, entre otros países, y llegó a ser comandante general del Cuerpo de Bomberos de San Pedro Sula.

Años después fue nombrado comandante general de la institución a nivel nacional, llegando a fundar más de 11 estaciones de bomberos en toda Honduras.

Roberto Rodríguez Borjas nació en San Pedro Sula un 31 de diciembre de 1938.

UN HÉROE EN LANCHA

En noviembre del 2020, cuando la tormenta Eta inundaba el Valle de Sula, el excomandante Rodríguez se volvió a poner su uniforme de bombero. Hace tres años se había retirado de la institución, pero al ver en las noticias que familias enteras permanecían en los techos de las casas para no morir ahogadas, él sintió el llamado de servir.

Otro de sus hijos, Herby Ernesto Rodríguez Marcos, manifiesta que “cuando empezó la primera tormenta nos sorprendió el darnos cuenta, y bastante tarde, que él se había ido, que había agarrado su lancha, todo su equipo de rescate que tenía a mano y se fue, sintió el llamado para ir a rescatar gente y se fue y no nos avisó”.

“¡Ya se imaginará el susto!, la angustia para nosotros y todos mis hermanos saber que estaba allá y la señal era malísima, no caían las llamadas, claro, estaban colapsadas las redes”, recuerda.

Aunque no se podían comunicar con su padre, el GPS instalado en su teléfono les permitió ver por dónde se desplazaba en su lancha y fue así que se dieron cuenta que recorría el sector de La Planeta.

“Ya en la noche, cuando por la misma aplicación vi que ya venía de regreso, fue un gran alivio para nosotros. Nos quisimos poner bravos con él, pero más bien se rió”, expresa Herby.

El veterano bombero continuó haciendo sus recorridos en lancha por las zonas inundadas, de jueves a domingo, desde que salía el sol hasta que anochecía, habiendo rescatado a decenas de familias, de un viaje a otro. También gestionó ayuda humanitaria para los pobladores afectados por la tormenta Iota.

En diciembre le detectaron COVID-19 y también a su hija Lourdes Suyapa. El 31 de enero del 2021 perdió la batalla contra el mortal virus. Miembros del Cuerpo de Bomberos le dieron el último adiós con todos los honores, al son de las sirenas bomberiles. (CF)

El valiente bombero se casó con Adelfa Marcos Guerra.

UN PADRE EJEMPLAR

El excomandante, junto a su esposa Adelfa y sus hijos Herby Ernesto, Lourdes Suyapa y Allan Roberto.

La muerte del excomandante general de bomberos, Roberto Rodríguez Borjas es una herida aún abierta en el corazón de sus hijos, quienes lo recuerdan como un padre ejemplar y un esposo amoroso.

Su hijo, Herby Ernesto Rodríguez Marcos, afirma que “fue cariñoso, al ir creciendo nosotros teníamos disciplina… Nos transmitió siempre el esfuerzo que se tiene que hacer para ganarse la vida, trabajando duro”.

Además, les enseñó “que todo se puede lograr siendo una persona honesta, humilde, sin tener que sentirse superior a nadie, esa actitud fue lo que lo hizo ser una persona bien querida a nivel de todo San Pedro Sula”.

Con nostalgia, cuenta que a su padre siempre le gustó cantar boleros del recuerdo y que con su mamá festejaron las Bodas de Plata y las de Oro.

“Con mi mamá tuvo una gran relación, prácticamente celebraron juntos las bodas de 25 años y las de 50 años, hicimos una celebración bien bonita aquí, en mi casa, fue admirable la relación que tenían ellos”, relata Herby.

En esta fotografía se ve al veterano bombero muy contento junto a sus hermanas ‘’Lupe’’, Edith, Lidia, Rosa y Teresa.

UN CORAZÓN NOBLE

Con admiración, Lourdes Rodríguez Marcos, hija del excomandante Roberto Rodríguez Borjas, recuerda que “mi papi fue siempre una persona que estaba dispuesta a ayudar a quien lo necesitara, tantas personas venían a buscarlo…”.

Dice que “en el simple hecho de podar los árboles, podaba hasta las ramitas porque decía que pasaba una señora después recogiendo las ramas que le servían para leña… ¡Era tan especial con todo el mundo!”.

“Con lo de las tormentas fue de igual forma, él se movió y fue de los primeros en empezar a alistar sus cosas para irse, sin importarle la angustia y el terror en que nos tenía a nosotros”, comenta Lourdes, quien se enteró de la muerte de su papá cuando ella también se encontraba hospitalizada, luchando contra el COVID-19, que por fortuna logró vencer.

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