Desorden

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12 de mayo de 2021
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12:39 am
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Desorden

Adiós 2020

Armando Cerrato

Dos hechos que debieran ser una manifestación de organización, eficacia y de buen ejemplo de búsqueda del bien común de la sociedad hondureña, tales como: el enrolamiento y entrega del Documento Nacional de Identificación (DNI) o tarjeta de identidad; y una jornada parcial de inmunización contra el SAR-CoV-2 que produce la COVID-19 son en términos reales un desorden “organizado”.

Da lástima y cólera a la vez el comprobar que el Registro Nacional de las Personas (RNP) responsable de la emisión del DNI está manejado por tres comisionados que responden políticamente al partido en el poder, Nacional; Libertad y Refundación (Libre) y Liberal. Supuestamente escogidos por las cúpulas de los centros políticos donde militan para reorganizar el RNP y la elaboración de un censo depurado con la emisión de un nuevo DNI, dado que la tarjeta anterior ya no muestra veracidad, las características fisionómicas faciales de las personas que la portan, debido al inexorable paso del tiempo hace que las personas cambien su aspecto año a año.

En el caso del DNI se hizo un enrolamiento en varios sitios del país y el documento se mandó a imprimir a Polonia y ya han llegado varios millones de ellos a Tegucigalpa para ser distribuidos en todo el país y entregados a su legítimo propietario. Se suponía al principio que la entrega del DNI se haría en el mismo sitio del enrolamiento del ciudadano preocupado por obtener un documento que le sirva no solo para identificarse sino para hacer trámites legales de toda índole y también para ejercer su derecho de elegir y ser electo de cara a un proceso electoral en el que se espera cambiar el rumbo histórico del gobierno, único elemento temporal de los tres que conforman el Estado, los otros dos son: el territorio y la población, únicos permanentes.

La primera jornada de entrega de documentos fracasó debido al desorden porque cuando se manda hacer un mandado a un tonto el mandado sale tonto, tal ocurrió cuando los tontos enviados a entregar los documentos informaron a los ciudadanos que los reclamaban que, su documento aparecía en otro departamento de los 18 que tiene Honduras. Para el caso alguien de Choluteca se le enviaba a reclamar su DNI a Roatán.
Las quejas de la ciudadanía hicieron que este desorden fuera suspendido supuestamente para eliminar la tontería y organizar lógica y objetivamente la entrega.

Recientemente y en Tegucigalpa se designaron 4 centros de entrega del DNI pero el desorden es ahora más caótico, porque los tontos siguen con sus tonterías y el mandado sigue saliendo tonto, porque a los tontos de arriba se les ocurrió utilizar la tecnología de Internet como que si todo mundo en Honduras tuviese acceso a ella, supiese utilizarla o tuviese equipo para imprimir una hoja de citas en el que el mismo solicitante fija el día y la hora según el sitio que aparece al ingresar el número del documento reclamado.

Miles de ciudadanos, especialmente de la tercera edad, primero los de 75 arriba y luego los de 60 a 75, hacen largas colas desde las primeras horas de la madrugada del día que les toca ir a recoger su DNI para ser de los primeros en entrar a las 8 de la mañana en que se supone comienza la entrega; pero los tontos enviados a hacer el proceso aparecen una o varias horas después y por portones que no han sido designados en las horas de cita, produciéndose un desorden tremendo en las filas y generando airadas protestas ciudadanas porque muchos de los adultos mayores son discapacitados o padecen de alta o baja presión, mala circulación, diabetes y otras enfermedades propias del patio y están expuestos a la intemperie siendo víctimas no solo de los tontos organizadores del desorden, sino de las inclemencias de la naturaleza, para enterarse varias horas después del sufrimiento que la información en la hora de citas resultaba equivocada y tener que desplazarse varios kilómetros a otro sitio en que está su documento y posiblemente de allí al otro y al otro donde le dicen que no está disponible todavía.

En cuanto a la jornada de vacunación y pese a que el sistema es uno de los mejores del mundo según la Organización Mundial de la Salud, es otro desorden organizado por tontos y por lo tanto el mandado está saliendo tonto y la historia se repite, largas colas a la intemperie de ciudadanos que esperan inmunizarse con una de las dos dosis de los escasos miles de vacunas donadas por el sistema COVAX, dado el éxito obtenido con una primera donación que hiciera el Estado de Israel y con el que se inmunizó a un determinado personal de salud con 2 dosis completas. Han llegado al país unas miles de dosis más para vacunar a personal de salud pública y privada y varios adultos mayores, produciéndose el reclamo de la población en general para que el gobierno obtenga cuanto antes varios millones de dosis más ante un avance incontenible de la pandemia que a la fecha alcanza las 100 muertes diarias en los hospitales de todo el país.

El gobierno ha dicho sin poner una fecha exacta que ha negociado con laboratorios rusos la compra de 1 millón de dosis de la vacuna Sputnik V y 4 millones de dosis más con las firmas estadounidenses Pfizer y Moderna que de resultar cierta la información serían suficientes para inmunizar al 82% de la población nacional (de entre 9 y 10 millones de personas). Mientras tanto el presidente de Rusia Vladimir Putin ha propuesto a todos los fabricantes de vacunas que liberen la fórmula para que las mismas puedan ser producidas por laboratorios nacionales que tengan la tecnología para tal solución abaratando y masificando su producción que por ahora solo produce ganancias multimillonarias para las firmas farmacéuticas que lograron desarrollarla.

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