Nacimiento y ocaso de aquellos cines tradicionales

¡HOLA, HOLA! mis amables lectores en la Honduras de acá y de allá.

Todo tiene su historia. La génesis del negocio del cine en Honduras lo supiste en ediciones de años atrás. Lo mejor del séptimo arte que vino a nuestro suelo.

El paso inexorable del tiempo con su constante evolución, el modernismo con sus nuevas ventajas y comodidades, la tecnología que día a día se muestra galopante ante los nuevos retos, incidió también en el futuro de este rubro en nuestro país.

Todos estos escritos quedan como un recuerdo para las viejas generaciones y un legado para las actuales y venideras. Deja que pasen algunos años más y verás que tendrán mayor valor histórico.

Cuando, seguramente ya no estemos, algo habremos dejado. Como compromiso quijotesco de este modesto comunicador y de un medio de comunicación comprometido con su generoso público que nos paga con su preferencia.

SURGEN LAS MULTISALAS

Llega 1970. Una nueva modalidad nace aquí. Los cinéfilos capitalinos tienen otra opción. Acorde con el modernismo que ya se utilizaba en otros países. Otra manera como disfrutar y seleccionar en un mismo lugar las cintas que cada una de estas ofrecía.

El sistema de multisalas llega este año con los Gemelos Maya, propiedad del doctor Geiza Younger. La sala 1 estaba equipada con la última tecnología 70mm.

Aquí se vivió el renacer del sistema 3D con algunas películas de gran éxito, pero –refirió en su oportunidad Ricardo Zúñiga, conocedor de este tema- por problemas de distribución se vieron obligados a convertirlos en cines porno que atrajo un público diferente. Esto alejó a los más conservadores.

Este cambio los obligaría a cerrar. Después, lo que fue la sala 2 dio pasó a ser una amplia discoteque. Muchos recuerdan a “Le Volcanique”. Corría 1978. En 1986 abrieron la entonces novedosa, video-disco “Copas” que inauguraron con el mundial de fútbol realizado ese año en México.

Un ávido público futbolero empezó a ver los encuentros. Pero después, la empresa tuvo una serie de problemas porque -al parecer– no tenían los derechos de proyección de los partidos.

Los de esa generación recordamos haber bailado en una pista- misma que tenía el cine al pie de la pantalla gigante- que dejó de pasar cintas cinematográficas para presentar los vídeos de moda que ponían el ambiente en la recordada “Copas”.

SIGNOS DEL ZODIACO

Los signos del Zodíaco también entrarían en el campo del negocio de cinematografía en la capital y con ello marcarían su propia historia. En 1978 abren los que se conocerían en ese tiempo como los Gemelos Alpha y Omega, propiedad de doña Queta de Lazarus.

Aunque solo se asistiera a una sala, era popular decir la frase completa: “Vamos a los Gemelos Alpha y Omega”. Se ubicaron sobre la avenida La Paz, cerca de la embajada Americana. Hoy aquí una empresa de seguros asistenciales relacionados con la salud.

En 1979, unos empresarios nicaragüenses operando como Exhonsa, instalan en el centro comercial Centroamérica unas imponentes salas. Las llamaron Regis-Real. Con el tiempo, amenazadas ante la competencia para el olvido y para darles una moderna reingeniería, pasan a formar parte de la firma nacional Espectáculos S.A.

Después vendría el Sagitario y en 1988 se agrega la sala Opera. Exitosamente regenteadas por el empresario don Humberto Culotta cobran nuevos brillos. Este mismo empresario inaugura los cines Aries y Tauro en la subida a Casamata.

Esta zona nunca esperó tener cerca salas de cine. Tenían que ir hasta “el centro” para ver sus películas favoritas. Después de la última tanda, ya bien entrada la noche, muchos regresaban “a pie” a sus hogares. Eran los tiempos en que nada o poco ocurría en cuanto a la violencia y delincuencia.

También por estas fechas se abre el cine Belén, de Comayagüela. Tuvo corta vida. Por los mismos factores en contra que sufrieron otras salas y que conocerás si sigues leyendo.

OTRAS SALAS LLEGAN

Esta misma firma, dada la afluencia de público amante al cine, expande el negocio. Abren otra sala: Cine “Leo”. Pegadita a Aries y Tauro. Vean cómo van adhiriéndose más nombres zodiacales. En ese tiempo, un pequeño estacionamiento de tierra al lado del edificio era suficiente. Nada comparado con las exigencias de hoy.

La metamorfosis se va dando poco a poco. La conducta del consumidor va cambiando. Con la llegada de más salas, superiores en comodidad y modernismo, atraen la clientela que antes tenían los cines de Tegucigalpa y Comayagüela.

Es de esta manera que se daría –antes o después- el fenómeno. Una de las tantas razones que aceleran el cierre de tradicionales como Clámer, Variedades, Hispano, Moderno, Roxy, Lux, Obelisco, Centenario, Morazán, Kennedy y compañía. No necesariamente en este orden.

Llega 1980. Dando inicio a los que muchos recuerdan como “la época dorada de los ochentas”. En la que en un principio se conoció como Plaza Miraflores (hoy mall) da un toque importante para su público. Abren Multicines Plaza.

Con el atractivo del centro comercial, amplio estacionamiento, con variedad de tiendas y otros múltiples servicios en un solo predio, el público ahora prefiere esta otra opción. Más cómoda y moderna. Aún no se conocía el nombre de “mall”.

Y…

Habrán de suponer que ya fenecidas las salas tradicionales y con la llegada de cines en centros comerciales como el “Centroamérica” y “Plaza Miraflores”, los que quedaba en la periferia como Aries, Tauro y Leo, también sufrirían el proceso normal del modernismo. Iban poco a poco siendo olvidados…

Continuará…

Por hoy hasta aquí. Hemos dejado otra huella imborrable en el pedregoso camino de un ya largo trajinar. Hasta el próximo sábado si Dios quiere.

¡QUE EL SEÑOR NOS CUIDE A TODOS Y LLEGUEN ESAS VACUNAS!

Comentarios y más a mi correo: [email protected]. Y en mi muro en FB Carlos Arturo Matute.

RELAX
Hoy les hemos traído algo de un ayer. Aunque hay temas quizá más interesantes y de actualidad como esto de las vacunas. Pero un paseíto mirando paisajes de recuerdos, no cae mal. Como relax.

Ese tan cacareado asunto de la inoculación de todos, nos tiene los nervios de punta. Bueno, no a todos. Porque los ricos y famosos agarraron un avión y se fueron a vacunar al exterior. Y otros vivos del gobierno se colaron entre los de “primera línea” por su poder en contactos. Como siempre.

A los de abajo, solo nos queda rogar a Dios que vengan las tales vacunas cómo sea, de dónde sea y de la firma que sea, para preservar la vida. Lograr pasar a otra etapa redoblando esfuerzos y salir adelante.

Ya se sabe -y se ha dicho hasta la saciedad- la inoperancia y tortuguismo del gobierno y sus entes encargados, como el de Salud, incapaces de tomar desde el comienzo de esta cosa fea, decisiones rápidas en busca de resultados beneficiosos para la población en general.

Que estamos en la cola de la cola en comparación con los países vecinos. Uno, aquí cerquita, El Salvador, que hizo lo propio para los suyos y ahora más bien está donando los pinchazos de vida.

Las noticias funestas de muertes y más contagios mantienen en zozobra a la población. Aunado a otros problemas colaterales. Hospitales saturados, ausencia de los niños a sus escuelas, los jóvenes a sus colegios, a la universidad, el aumento a la canasta básica, el desempleo, no hay plata. En fin.

Como un paliativo, súbanse a los vagones del tren que nos conducirá -aunque sea por unos instantes -a través del túnel del tiempo.

Total, quizá, aquellos fueron tiempos mejores…