Ganaderos buscan prevenir la rabia paralítica bovina
La peligrosa enfermedad no solo afecta al ganado, ya que si no se controla, puede afectar a las personas.
Alrededor de 80 ganaderos y técnicos del país fueron capacitados en prevención de la rabia paralítica bovina en Honduras.
Las capacitaciones estuvieron bajo la coordinación del Servicio Nacional de Sanidad e Inocuidad Agroalimentaria (Senasa).
Esta primera actividad es parte del plan estratégico que se desarrollará en los próximos meses, con el fin de lograr prevenir los casos de rabia en varios departamentos del territorio hondureño.
El director general de Senasa, Juan Ramón Velásquez, advirtió que “debemos reconocer que esta enfermedad es de relevancia sanitaria y solo juntos podemos prevenirla”.
PÉRDIDAS ECONÓMICAS
Velásquez agradeció el apoyo del Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA), del Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), y la Federación Nacional de Agricultores y Ganaderos de Honduras (Fenagh).
La charla magistral, a través de la plataforma Zoom, estuvo a cargo de Baltazar Cortés García, jefe del Departamento de Rabia Paralítica y Garrapata en la Dirección General de Salud Animal y la Dirección de Campañas Zoosanitarias del SENASICA-México.
Por su parte, la presidenta de la Fenagh, Anabel Gallardo, expresó que es importante que “todos aunemos esfuerzos en el tema de prevención de la rabia bovina, considerando que la muerte de animales como consecuencia de mordidas de murciélagos en diferentes zonas del país, representa pérdidas económicas para el sector”.
De igual forma, el director técnico de Salud Animal, Rafael Rodríguez, expresó que la rabia paralítica es una enfermedad infecto-contagiosa de origen viral, que afecta a bovinos y otras especies ganaderas como equinos, caprinos, ovinos y porcinos.
FÁCIL TRANSMISIÓN
El padecimiento se transmite a través del contacto con la saliva de los animales infectados, ya sea por una mordida o por el contacto directo de esta con las mucosas o alguna herida en la piel, detalló Rodríguez.
Este tipo de rabia afecta el sistema nervioso, tiene un curso agudo, progresivo y mortal y es considerada de importancia para la salud pública, ya que es una enfermedad que se transmite al ser humano (enfermedad zoonótica), según advirtió el funcionario.
Agregó que el principal transmisor es el murciélago hematófago o vampiro común (Desmodus rotundus), quien puede ser portador del virus de manera natural y contagiar a los animales de los cuales se alimenta.
El murciélago hematófago habita en las regiones tropicales y subtropicales del continente americano, se establece en árboles huecos, cuevas, casas abandonadas, alcantarillas, puentes, grietas en las rocas y conforma colonias de 20 a 50 animales.
