CONMEMORACIÓN DEL BICENTENARIO, 1821-2021

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22 de mayo de 2021
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CONMEMORACIÓN DEL BICENTENARIO, 1821-2021

Vicente Mejía Colindres a Carías Andino: “DESEO QUE EN ESTE CARGO SEAS MENOS INFORTUNADO QUE YO”

Discurso, poema y juramento

Ismael Zepeda Ordóñez

JUAN LINDO

En el contexto de los esfuerzos unionistas por reconstruir la República Federal de Centroamérica, identificamos a la Dieta de Chinandega en 1842, la Asamblea Nacional de la Representación Centroamérica en 1851, la creación de la República Mayor de Centroamérica en 1895; y el proyecto unionista de 1921 en la conmemoración del primer centenario de la independencia centroamericana, son parte de las iniciativas por alcanzar acuerdos políticos de unidad centroamericana. La administración del presidente Juan Lindo, 1847-1852, respaldó toda iniciativa en favor de la nacionalidad centroamericana. Ratificó en la Constitución política de 1848 la obligación consignada en la Constitución de 1825 y 1839 de formar parte de los Estados Federados de Centroamérica. De particular importancia es la convocatoria del presidente Lindo para instalar la representación centroamericana. Porque el primer jefe de Estado de Honduras don Dionisio de Herrera Díaz del Valle dejó un legado de unos mil doscientos pesos en su testamento, dictado el 30 de mayo de 1850 en San Salvador, para contribuir a los gastos de instalación de la Asamblea Nacional de la representación de Centroamérica. Eliminar el exequátur al cónsul inglés Federico Chatfield fue una expresión política de condenar la política intervencionista de los británicos desde 1837, rechazando la figura de Chatfield como portavoz de la presencia imperialista de la vieja Albión en la región. La vocación unionista es manifiesta en el discurso del presidente Juan Lindo a los pueblos de Centroamérica. Comayagua, 15 de septiembre 1850: “Impulsado únicamente por el deseo general de mis conciudadanos, por ese clamor del pueblo para nacionalizarse, y lejos de mi toda mira personal, he resuelto por el bien común no solo de mis comitentes sino de todos los hijos de la República, emitir el decreto de 14 del presente convocando un congreso, que tenga su origen de la nación entera, para que determine de nuestra futura suerte, resolviendo la manera en que la República debe existir en lo de adelante, pues hasta ahora el ser político de los estados es de hecho, y está en oposición al pacto del año de 1824, que no se ha desconocido por el orden legal; resultando de aquí la fuente de los innumerables males que por tantos años nos han afligido, y que de instante a instante van aumentándose como para acabar de una vez con nuestros últimos recursos. ¿Y los hijos de Centroamérica que tantas pruebas han dado de su acendrado patriotismo, no unirán sus esfuerzos con el Gobierno de Honduras para llevar a cabo la grande obra de regeneración para afianzar sobre columnas indestructibles nuestra dicha y nuestro bienestar y poner fin a esa fuente inagotable de desgracias? Pero no quiero ni debo vacilar sobre nuestra fidelidad para con nuestra cara patria. Y por lo mismo con la confianza que me inspira vuestro amor por la libertad, espero levantareis a un tiempo con Honduras, el estandarte que ayer he proclamado, resuelto a sostenerlo, aun a costa de la sangre que corre por mis venas. Vais a ser libre porque vuestros representantes deliberarán a la sombra de la libertad, y las resoluciones que de ellos dimanen serán una ley, para aquellos pueblos cuyos diputados las adopten; de lo que resulta que vosotros mismos os vais a dar las instituciones que más convengan a vuestra localidad, a vuestros recursos y a vuestros intereses. Estoy firmemente resuelto, por convencimiento y por el amor entrañable a esta mi patria natal, a no dejar de la mano la grande obra que hoy me propongo, jurando a la faz de todos los pueblos de esta república, que cesará mi ansiedad cuando vea reunido el congreso nacional, y que hasta entonces será para mi placentera la muerte, pues iré al sepulcro con el consuelo, de que Centroamérica no será en lo sucesivo víctima de la anarquía, ni presa de la ambición extranjera”. Comayagua, septiembre 15 de 1850. JUAN LINDO

IMPRENTA DE JOSÉ MARÍA SÁNCHEZ

II. Informe del Jefe Político de Santa Bárbara en la celebración del 15 de septiembre de 1852, Miguel de Paz, incluye este poema del profesor Anselmo Guillén.

SALVE CANCIÓN A LA LIBERTAD

Salve canción a la libertad. Salve, salve, celestial potencia. Fuerte poder.

Maldición terrible. Tú decretastes al ser invencible que oprimió al servil y el infeliz

Rompió la cadena al triste esclavo. La Iberia entonces lloró afligida,

Y el fiero león con frente erguida huyó espantoso del hombre libre

Año veinte uno: ¡dulce memoria. Un iris nuevo bajo del cielo.

Dio libertad, quebrando el cetro con la corona del Rey soberbio

Valientes mártires que en las batallas su sangre libre la derramaron

Mas sus reliquias se consagraron al sacro templo de la Minerva.

Anselmo Guillén.

III. Saludo a la bandera en la Villa de Santa Rosa por el Jefe Político José Gregorio de Paz el 10 de junio de 1834.

¡Soldados!

Esa bandera que veis flamear y aquí en consagrar sus bendiciones el ministro de la Iglesia simboliza la potencia nacional y la del Estado reverente en los supremos gobiernos de uno y otro. La habéis jurado y por lo mismo os habéis comprometido a sostenerla con vuestra sangre.
¡
Soldados!…, No sois ya los agentes de un Rey absoluto, o los instrumentos de extraños, sino la columna de la Ley que nace de la voluntad general. El apoyo de la libertad, el asilo de la seguridad pública y el parapeto inexpugnable contra la dependencia y usurpación.

Vuestra y justa casaca os conduce a los campos del honor, y os cubrirá de una gloria inmortal si sabéis llevar los sagrados deberes que habéis contraído como ciudadanos y como militares.

Viva la Republica del Centro. Viva el Supremo Gobierno. Vivas la Federación.

Villa de Santa Rosa. Junio 10 de 1834.

(f) J. Gregorio de Paz.
NOTAS:
1. Pérez Cadalso, Eliseo. 1959. La dieta de Chinandega y sus proyecciones políticas. Revista Ateneo. Separata. Mayo de 1959. San Salvador.
2. Trejo Castillo, Alfredo. 1961. Retazo de historia documental organización, desarrollo y ruptura de la República Mayor de Centroamérica. Imprenta Atenea. Comayagüela.
3. Vida y escritos de don Dionisio de Herrera, 1950. Publicaciones de la Sociedad de Geografía e Historia de Honduras. Talleres Tipográficos Nacionales. Tegucigalpa, págs. 82-83.
4. Impreso. Año 1850. ANH. Tegucigalpa.
5. Impreso. Decreto del 14 de septiembre de 1850. Circular del Ministro General José María Rugama a todos los Jefes Políticos departamentales.
6. Caja de documentos. Número 7. ANH. Tegucigalpa.
7. Documentos del año 1834. ANH. Tegucigalpa.

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