Más de 2,000 migrantes retornados se beneficiarán con ayuda económica
Se destinarán unos 600 mil lempiras para apoyar en emprendedurismo a migrantes retornados en varios departamentos del país.
COPÁN. Como parte del plan de respuesta a la niñez, adolescencia y sus familias migrantes retornadas al país, producto de la migración irregular, el gobierno de Honduras, a través de la Dirección de Niñez, Adolescencia y Familia (Dinaf), en el 2021 destinará unos 600 mil lempiras para apoyar en emprendedurismo a más de 2,000 personas miembros de 60 familias.
En el primer Comité de Apoyo Financiero recién celebrado se aprobó erogar los primeros 170 mil lempiras en favor de 17 familias migrantes retornadas, a quienes se les estará haciendo entrega del mismo a finales de junio e inicios de julio del año en curso.
La ayuda financiera será entregada por las reintegradoras que la Dinaf mantiene en diferentes zonas estratégicas del país con apoyo del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), en el contexto de la metodología de Reintegración Social que desde el año 2018 se puso en marcha.
El fondo consiste en una ayuda financiera que va desde 3,000 a 10,000 lempiras entregados a las familias migrantes retornadas en el marco de su proceso de reintegración familiar y comunitaria, para ser utilizados en negocios de emprendedurismo dirigidos al cultivo o comercialización de granos básicos o productos agrícolas.
La ayuda se otorga tomando en cuenta una serie de elementos que se establecen dentro del Reglamento de Apoyo Financiero a las Niñas, Niños y Adolescentes Migrantes Retornados y sus respectivas familias, priorizando a niños, niñas o adolescentes con evidente enfermedad o condiciones médicas especiales, adolescentes embarazadas, mujeres jefas de hogar y personas en situación de discapacidad.
Las familias que serán beneficiadas son originarias de los departamentos de Cortés, Yoro, Atlántida, Copán, Olancho, Francisco Morazán, y Choluteca.
La Dinaf, a través de las reintegradoras, realiza visitas a los hogares de niños y niñas una vez que han sido reintegrados a la comunidad, para verificar el cumplimiento de sus derechos humanos y, a la vez, coordinar acciones con los diferentes servicios locales, a fin de dar respuesta oportuna en alimentación, vivienda, salud, educación, protección familiar y desarrollo integral.
La iniciativa de ayuda financiera ha permitido la construcción del plan de vida de más de un centenar de niñas y niños que han retornado al país, con quienes se trabaja el entorno familiar, gestionando para sus familias capital semilla para emprender un negocio en su comunidad, y en apoyo a otras instituciones.
