Fideicomisos APP no están regulados, advierte el FMI
Los fideicomisos de las Alianzas Público-Privadas (APP) en Honduras son parte de los riesgos fiscales del país y una de las preocupaciones es porque no existe una regulación ni estrategia para gestionarlos, establece un informe del Fondo Monetario Internacional (FMI).
“No hay una estrategia de gestión de los fideicomisos principalmente porque no existe regulación pública”, sostiene el organismo en el “Informe de Asistencia Técnica-Evaluación de Transparencia Fiscal” completado en abril del 2020 y publicado el 8 de este mes.
La investigación abarca varios aspectos de las finanzas públicas y en lo que toca a los fideicomisos creados por distintas vías, pero en especial por la desparecida Coalianza, establece que “la única ley que aplica a los fideicomisos es el Código de Comercio”.
Además, “la falta de un completo marco legal para el fideicomiso impide implementar procedimientos de contabilidad bien definidos. Los fideicomisos de la Nota 10 de los estados financieros corresponden a la AC” o Administración Central.
“El resto de los fideicomisos queda gestionado por instituciones descentralizadas”. Las empresas públicas “también gestionan directamente sus fideicomisos y lo reflejan en sus estados financieros”.
De acuerdo al informe de 112 páginas, “en el caso de los fideicomisos gestionados por los bancos”, estos reportan a la Secretaría de Finanzas y se hacen los ajustes contables, “pero en ningún caso hay afectación presupuestaria”.
“Existen algunos casos públicos de falta de transparencia en la gestión del fideicomiso, por ejemplo, en Banadesa, según las discusiones mantenidas con las autoridades”, revela el documento preparado por los funcionarios del FMI, Ramón Hurtado, Concha Verdugo, Mariana Sabatés, Marta Morano y Natalia Salazar.
La advertencia del FMI coincide con las de diferentes organismos de la sociedad civil hondureña, que en su momento, han calificado a la figura de los fideicomisos como agujeros negros o cobija de opacidad sobre fondos de los contribuyentes.
Una de las dificultades que presenta este modelo de gestión, muy de moda en Honduras desde hace una década, es que recursos de los contribuyentes pasan a ser administrados por bancos comerciales, lo que dificultan la veeduría social.
El informe establece que bajo fideicomisos hay más de 30 mil millones de lempiras, en aproximadamente 11 proyectos, la mayoría, construcción de infraestructura carretera. (JB)
