Madera y láminas piden mercaderes para tratar de reconstruir sus locales

Pese a que recientemente Fernanda Chávez sufrió un derrame cerebral, no dejaba de trabajar para suplir las necesidades del hogar.

Durante 17 años había trabajado en su negocio de calzado para hombres y mujeres que estaba ubicado en la 6 calle segunda avenida de San Pedro Sula, sin embargo, ahora solo hay escombros y cenizas, tras el incendio ocurrido el pasado sábado en horas de la noche.

Chávez relató que durante esos años de mucho trabajo le tocó aguantar sol, lluvia y hasta hambre, porque se esforzaba mucho para sacar adelante su negocio.

Además de ahí dependía su familia, incluyendo a sus padres que ya son adultos mayores y no pueden desempeñarse en ningún área laboral.

“Pedimos que por favor nos ayuden para construir de nuevo el local, necesitamos con urgencia madera y zinc, ya con lo demás nosotros veremos cómo hacemos con nuestros proveedores, porque lo más importante es tener el espacio que teníamos ya arreglado”.

Chávez reveló que en el local tenía más de 50 mil lempiras en producto y que tuvo que sacar un préstamo de 80 mil para poder surtirlo y trabajar, sin embargo, con la llegada de la pandemia del coronavirus no podía salir de la deuda, pero ya había comenzado a ponerse al día con los pagos y de repente ocurrió el incendio.

Lesbia Méndez, es otra de las afectadas quien tenía 22 años con su negocio de calzado para mujeres y niños, también aseguró que necesitan unos 30 mil lempiras para construir el local y suplican a los diputados y a las autoridades locales para que les apoyen con los materiales de construcción.

Relató que el día del siniestro estaba en su casa cuando de repente alrededor de las 9:00 de la noche le avisaron del incendio y cuando llegó solo habían pasado 15 minutos y su puesto ya había sido consumido por las llamas.

Perdimos todo, apenas empezábamos a reponernos por la pandemia y las tormentas y ahora esto, necesitamos que nos ayuden, al acalde por favor échenos una mano”.

55 LOCALES

Hasta ayer se habían contabilizado unos 55 puestos que fueron consumidos por las llamas, los comerciantes tenían surtidos de ropa, zapatos y alimentos, hasta la fecha se desconocen las pérdidas totales, sin embargo, los comerciantes aseguraron que son varios millones de lempiras los que perdieron.

Luis Rivera, presidente de la Asociación Nacional de Vendedores Independientes de Honduras (Anvih), expresó que desde ayer comenzaron a realizar un censo de las personas afectadas para no dejar a nadie por fuera ya que la municipalidad les ofreció apoyo, pero necesitan llevar a cabo un proceso en el que se oficialicen los comerciantes que sufrieron las pérdidas.

“Nos urgen los materiales para construir de nuevo y posteriormente hay que tratar la manera de conseguir financiamiento para que puedan empezar de nuevo”.

Alberto Marín, representante de la alcaldía municipal, comentó que ya están coordinando con algunas organizaciones para que los mismos locatarios puedan remover algunos de los escombros porque hay ciertos materiales que se pueden rescatar y desde ayer iniciaron las cuadrillas de limpieza para rehabilitar el área.

Marín aseguró que en unas 24 a 48 horas van a tener totalmente limpio el lugar y luego van a brindar asistencia humanitaria que la alcaldía pueda dar, pero para ello necesitan realizar un proceso de validación de las personas afectadas que es en lo que están trabajando en estos momentos.