Una piedra en el zapato
Armando Cerrato
Licenciado en Periodismo
Rixi Moncada, representante del partido Libertad y Refundación (LI-BRE) ante el Consejo Nacional de Elecciones (CNE), ha advertido que si el Congreso Nacional, dirigido por el nacionalista Mauricio Oliva Herrera, no aprueba una ampliación de su presupuesto, de casi setecientos millones de lempiras, el proceso electoral diseñado para efectuarse el último domingo de noviembre de este año está en peligro.Dirigentes de partidos emergentes -9- coinciden con la afirmación y achacan a la mayoría de diputados nacionalistas del Congreso Nacional la desidia y cuasi indiferencia ante las necesidades económicas del ente rector de la considerada esencia democrática de la vida republicana de Honduras, como lo es la elección cada 4 años de un presidente, 3 designados a la Presidencia, 128 diputados al Congreso Nacional e igual número de suplentes, 20 diputados propietarios y sus suplentes al Parlamento Centroamericano y 498 corporaciones municipales.La advertencia de la comisionada de LIBRE abre el telón a varios escena-rios, puesto que el atraso en la aprobación de la ampliación presupuestaria impide la implementación inmediata del uso de tecnología digital para la transmisión de datos de cada una de las mesas, que en teoría serán a través de una tableta para el registro del acta final, donde en cada mesa los tres partidos mayoritarios: Nacional, Liberal y LIBRE, tendrán el control, mientras que entre los pequeños escogerán dos miembros suplentes y el resto podrá acreditar observadores, evitándose así el manipuleo pernicio-so y alteración de los datos matemáticos y de otra índole en el proceso que legitiman.
En este escenario el peligro que se corre es que se sigan manipulando las actas, cuyo registro se realiza hasta que todas están en las bodegas asignadas para su recuento en Tegucigalpa.Con la transmisión de datos mediante la digitalización se conocería el resultado pocas horas después de cerrar las urnas y la garantía estriba en que además de llegar a un servidor en Tegucigalpa también entrarían de inmediato a servidores de los centros de cómputo de los partidos en liza.Además el Consejo Nacional de Elecciones adquiere un sistema de identificación de huellas dactilares para asegurarse que los votantes, que además contarán con un nuevo documento de notificación personal son además los propietarios del mismo, ya que en procesos anteriores el Censo Nacional Electoral no depurado, permitía que personas ya fallecidas apareciesen como votantes.Otro escenario del peligro es que no se realicen las elecciones por falta de presupuesto, lo que abre las puertas para que el actual mandatario nacionalista, Juan Orlando Hernández Alvarado, alegando varios tecnicismos para la no realización de elecciones y contando con el apoyo de las Fuerzas Armadas, decida quedarse indefinidamente en el poder, apoyado además, en la lucha contra la pandemia de COVID-19 y el éxito de alguno de sus programas sociales muy publicitados últimamente, y posiblemente cuente con el apoyo del gobierno de Estados Unidos con el que se muestra muy complaciente.
Otro escenario, y el cual sería el peor y el verdaderamente peligroso, es que el pueblo cansado de la mentira, la corrupción desmedida, el sa-queo descarado de las instituciones públicas, el alto índice inflacionario, el descalabro de la educación pública y la salud, la incapacidad legislativa y la inseguridad individual y colectiva, una Corte Suprema de Justicia co-rrupta, una empresa privada voraz, codiciosa e inhumana, decida poner fin a las situaciones negativas que impiden su desarrollo socioeconómico y político, y emprenda el camino de una revolución armada, demostrando que no ha sido castrado, no como sostienen sociólogos y políticos ante el aguante demostrado hasta ho
