Semicolapso en maquinaria de hemodiálisis

MA
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17 de agosto de 2021
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12:34 am
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Semicolapso en maquinaria de hemodiálisis

Adiós 2020

Armando Cerrato
Licenciado en Periodismo

El sábado pasado el turno de hemodiálisis que comienza a la 1:00 p.m., con varios pacientes conectados a los riñones artificiales de la empresa Nipro se frustró debido a que todas las máquinas (50) se alarmaron provocando un escándalo que obligó a todo el personal médico y de enfermería en servicio a proceder a desconectar a medio mundo y sacarlo de sala al tiempo que se llamaba a los biomédicos para que revisaran la maquinaria computarizada.

Los biomédicos dijeron a los pacientes que posiblemente el sistema se restauraría hasta dentro de 3 horas por lo que muchos de los pacientes optaron por regresar a sus hogares sin terminar el proceso de diálisis y otros que iban en camino al ser alertados por alguno de sus amigos también se abstuvieron de llegar hasta las instalaciones del Instituto Hondureño de Seguridad Social en La Granja.

Yo era uno de los que iba a medio camino cuando recibimos una llamada de mi esposa de que nos regresáramos porque una amiga le había alertado del problema, dos minutos después de haber regresado a mi casa, la misma persona nos alertó que el problema había sido solucionado, llegué unos 20 minutos después y entré directo a la sala donde habían muchos cupos libres y fui conectado de inmediato, pregunté a la enfermera auxiliar que preparaba la máquina qué había sucedido y me dijo que no sabía nada porque acaba de recibir turno y nadie le había informado del problema, pero otra me dijo que el problema no había sido de las máquinas sino de los ácidos con los que se ceban para iniciar el proceso de hemodiálisis y por eso se había solucionado todo en menos de media hora.

Muchos de los pacientes que se habían ido regresaron ya tarde para terminar su proceso pero muchos de ellos lo hicieron alarmados y a raíz de ese asunto engorroso y peligroso se ha desatado un cúmulo de quejas por lo que se sufre (calambres, bajas y subidas de presión, convulsiones, alucinaciones, bajas de azúcar y potasio, pérdida de calcio y otras anomalías orgánicas debido a la mala calidad de los insumos).

Vale aclarar que la calidad de los insumos con que trabaja el personal médico y de enfermería no es responsabilidad de la empresa Nipro sino del propio IHSS en cuya farmacia y almacenes médico hospitalarios usualmente no hay medicamentos genéricos y mucho menos especializados y los insumos de hemodiálisis que no deben fallar son de baja calidad a grado tal que el índice de letalidad entre los pacientes renales es bastante alto ya que en los dos años que yo llevo en ese tratamiento, entré con el número 32 y hoy soy el número 8 eso en turno de las 4:30 p.m. de martes a sábado y en los otros dos turnos de esos días también se da casi el mismo promedio de fallecimientos y lo mismo pasa en los tres turnos que se realizan de lunes a viernes.

Muchos de los pacientes se quejan de la falta de comunicación existente, pues se ha sugerido al personal médico y de enfermería que se den charlas educativas e ilustrativas a los pacientes para que aprendan y comprendan el proceso médico al que están sometidos y que significa vida de calidad con ciertas restricciones en la dieta y el comportamiento en el desempeño de la vida diaria, pues todos los días aparecen nuevos pacientes con problemas renales y necesitando la hemodiálisis para sobrevivir.

Según los médicos un paciente que entra a hemodiálisis tiene una expectativa de vida de 10 años pero en el IHSS de Tegucigalpa hay algunos pacientes que llevan ya 15 años de tratamiento y se encuentra bastante bien de salud.

El personal médico y de enfermería de la Sala de Hemodiálisis que pertenece al IHSS es muy celoso en cuanto a la permanencia de familiares mientras se conecta a los pacientes, por lo que solo se permite el ingreso de los mismos cuando un paciente va en silla de ruedas o es invidente, se le saca de la sala en cuanto sienta al paciente en la silla donde será conectado y al momento de la desconexión cuatro horas después para que ayude a sellarle la vena.

Sin embargo personal de Nipro que no se sabe de dónde viene y si ha seguido todas las medidas de bioseguridad que esta pandemia exige, penetra indiscriminadamente en todas las áreas de hemodiálisis (6), a armar bingos, rifas y karaokes escandalizando sin importar que en la sala haya pacientes graves que incluso han sido bajados de las salas del IHSS donde están internos por otras afecciones pero necesitados de la hemodiálisis, que no se puede interrumpir porque se intoxica la sangre sino se limpia durante el tiempo necesario las tres veces por semana programadas.

El escándalo armado por la gente de Nipro es de una magnitud impresionante y pone en riesgo la actividad médica iniciada, pues muchos de los pacientes al descargar sus emociones cantando también tienden a accionar sus brazos provocando la infiltración de la agujas lo que produce hemorragias y lo que es más peligroso que las mangueras se desconecten provocando que por los canalizadores la sangre salga a borbotones.
A los pacientes hay que enseñarles y nadie lo hace, cuál es su masa corporal, su peso seco y cuántos kilos de más debe sacarse en cada sesión para no acalambrarse, los medicamentos que debe aplicarse, la heparina (anticoagulante) que debe usar y la dieta a seguir, cosa que debería hacer el IHSS o la empresa Nipro a través de un boletín semanal que distribuye interrumpiendo la sesión de cada paciente.

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