A través del programa Aprende y Emprende 80 mujeres se preparan para tener sus negocios

Con el fin de ayudar a que las mujeres de zonas vulnerables y estigmatizadas por la violencia puedan generar ingresos económicos a sus hogares, el programa Aprende y Emprende está beneficiando a 80 féminas con la elaboración de varios productos para que puedan tener su negocio.

El programa es auspiciado por la Asociación de Padres Paulinos en Honduras de la Parroquia San Vicente de Paúl, quienes gestionan ayudas en España, pero también cuentan con el apoyo del World Vision para llevar a cabo las actividades.

“El programa Aprende y Emprende surgió del proyecto Amigos para Siempre, las madres de los niños que apoyamos son las beneficiadas con talleres, productos y capital semilla para que puedan generar ingresos a sus familias a través del emprendimiento”, expresó Sor Antonieta Pérez, coordinadora del proyecto.

Comentó que el programa Amigos para Siempre es una iniciativa para apoyar a los niños para que estudien, les dan reforzamiento de sus clases, esto les permite aislarlos de la violencia, asimismo es un trabajo preventivo para que no caigan en drogas y delincuencia, de esta manera les evitan el acceso a organizaciones que cometen ilícitos.

Pérez manifestó que a las beneficiadas no solo se les enseñan a elaborar sus productos, sino que también les brindan atención psicológica para que vayan valorándose y creyendo en sí mismas, porque muchas tienen problemas de autoestima, además las capacitan con clases de computación, recalcó el apoyo de World Vision con asesoramiento a través de cursos y, sobre todo, cómo manejar una empresa.

Las mujeres que están aprendiendo para emprender son de zonas estigmatizadas por varios factores sociales, entre ellos la violencia, drogas y prostitución.

Barrio Sunseri es el lugar donde tienen el espacio para la formación de ellas, allí llegan de Medina, Cabañas, Tepeaca y también están incluyendo de lugares más lejanos como Pimienta, a futuro van a ir agregando otras zonas.

EDUCADORES

Neida Cobos tiene ocho años de estar como educadora en el programa y expresó que trabajan con unos 280 niños brindándoles reforzamientos que les ayuda con sus estudios escolares, sin embargo, debido a la pandemia tuvieron que hacer algunos cambios dando clases por internet y ahora ya reciben entre 12 a 15 niños distribuidos en varios grupos en las instalaciones del proyecto.

Asimismo, declaró que las mujeres reciben talleres sobre la elaboración de productos de limpieza y de bioseguridad, hacen candelas, panadería, boquitas, entre otros, “elaboran cierta cantidad de productos y empiezan a ofrecer, así van teniendo clientes”.

Para el educador Roger Hernández, que lleva dos años y medios colaborando en el programa, ha sido gran experiencia, ya que llegó por invitación de un amigo, pero el experimentar trabajar con niños de estas zonas ha marcado su vida.

“Son familias de lugares marginados por la violencia, drogas y zonas donde se da bastante la prostitución, por eso el programa es de prevención para poder apoyarlos con actividades les permitan superarse y salir adelante”.

Hernández dijo que realizan varias funciones, entre ellas, visitas domiciliarias de los becados del programa, lo hacen de casa en casa y allí ven en la situación que se encuentra el niño, de esa manera logran obtener datos con los cuales se ejecutan los proyectos.

“Los casos más fuertes que se dan son problemas con las drogas, desintegración familiar, abusos sexuales en todas las edades, pero las más afectadas son las niñas de 12 años por el tema de la prostitución, pero para eso se dan estos espacios para prevenir que caigan en esto, dijo” Roger Hernández.

BENEFICIADA

Ernestina Caballero es una de las beneficiadas y dijo que el programa ha sido de gran apoyo porque a través de los talleres ha aumentado sus conocimientos y la impulsa a buscar trabajo en el rubro, además le han dado la oportunidad de emprender y pone su negocio.

“Con lo que he aprendido también me ha servido para buscar trabajo, por ejemplo, con el taller de panadería puedo optar a un puesto laboral en ese rubro”.

Agregó que espera sigan impartiendo los talleres porque es un gran apoyo para las mujeres de estas zonas discriminadas por la misma sociedad. (JC)